La llegada de los superhéroes Marvel a España

Antecedentes

La llegada de los superhéroes Marvel a España se produce con el lanzamiento del primer ejemplar de Los 4 Fantásticos de Ediciones Vértice que tradicionalmente se databa de forma genérica en 1969 sin mayor precisión a falta de fechas de edición, atendiendo al año de los depósitos legales que figuran en los primeros ejemplares Marvel de esta editorial.

Esta situación cambió a finales de la década de los 90 cuando Raimon Fonseca ofreció nuevos datos en el correo de los lectores de la Biblioteca Marvel, que en el caso de Los 4 Fantásticos recibió el título ¡Es la hora de las cartas! y en ella aparecía regularmente, a modo de apéndice final, la sección “Departamento de detalles importantes:” que ofrecía datos e informaciones relacionadas sobre los comics en curso de publicación. En esta sección, correspondiente al número 9 de septiembre de 1999, se hacía referencia al 30 aniversario de la llegada de Marvel a España especificando como fecha probable del evento, el mes de septiembre de 1969.

Si bien, parece claro que la información aportada por Raimon es estimativa, a partir de aquí se inicia el proceso de universalización de esta referencia.

Universo Marvel, añadió esta información a la correspondiente ficha del primer ejemplar de Los 4 Fantásticos de Ediciones Vértice, al tiempo que se incorporaba la fecha de septiembre de 1969 a la misma indicándose la siguiente nota:

Según anota Raimon Fonseca en Biblioteca Marvel Los 4 Fantasticos #9, se trata del primer cómic de los Cuatro Fantásticos editado en nuestro país, además del primer cómic con personajes del Universo Marvel de la editorial Vértice. La fecha de aparición procede de la misma fuente.

Universo Marvel. Ficha 4 Fantasticos nº 1

Asimismo y como texto de presentación para las fichas españolas fue adoptado el siguiente comentario:

En septiembre de 1969, la editorial Vértice comenzó a publicar en España distintas colecciones de la editorial Marvel.

Universo Marvel. Fichas españolas. Agustín Mansilla. 19 de Agosto de 2004.

A continuación Agustín Mansilla alcanzó acuerdo con Manuel Barrero para compartir contenidos entre Universo Marvel y Tebeosfera y posteriormente hizo lo propio con los responsables de Grand Comics Database, webs de amplia difusión nacional e internacional, exportándose esta datación a Tebeosfera, y GCD al incorporar la fecha de septiembre de 1969 a sus respectivos registros de este ejemplar, reforzando todavía más la universalidad de esta referencia. No nos queda constancia de las fechas de ambos acuerdos pero no son recientes y llevan ya cierto tiempo.

En 2010 volvemos de nuevo a Raimon Fonseca, quien en su artículo por capítulos Marvel en España: una historia, en el Capítulo 4 (Spiderman 46, Agosto 2010) se definía el inicio como “… gran lanzamiento editorial del verano/otoño de 1969” y en los siguientes capítulos se seguirá refiriendo a ello en los mismos términos “al lanzamiento de verano/otoño de 1969”. Donde el autor estaba ampliando el rango de fechas e incluyendo los meses de verano de 1969, sugiriendo por tanto que el acontecimiento pudiera ser anterior a septiembre de 1969. Desde aquí mi reconocimiento a Raimon Fonseca por toda la información aportada sobre los superhéroes Marvel a lo largo de su dilatada trayectoria, recurriremos a él de nuevo a lo largo de este trabajo.

La datación mas reciente la podemos encontrar en el libro de Sean Howe, Marvel Comics, la historia jamás contada (Panini Books, marzo 2013), donde se incluye al final del mismo un apéndice titulado Marvel Cómics en España realizado por Alejandro M. Viturtia y Julián Clemente donde se toma como punto de partida otoño de 1969, lo que de nuevo implicaría un arranque editorial por septiembre de ese año.

Finalmente, el 23 de mayo de 2014, Agustín Mansilla autorizó también a la plataforma Whakoom, incorporándose allí la misma fecha.

El resultado de todo este proceso es la reafirmación y consolidación de esta fecha, adquiriendo el estatus de contrastada tanto en España como en el extranjero a pesar de que la propia fuente apuntó otras posibilidades desde 2010. A partir de estos puntos de referencia, la fecha de septiembre de 1969 fue diseminada gracias a la fuerza de Internet y hace mucho tiempo que se indica en numerosas anotaciones en la red. Sin pretender ofrecer una relación exhaustiva, ahí van algunas de ellas:

Dreamers

Dreamers. Historia de Marvel en España. José Luis Mora. 24 de septiembre de 2004

Raxar

Los cómics en España. Planeta vs Panini, con Norma mirando. Raxar. 12 de mayo de 2008

Cosmomarvel

Marvel con Ñ. Cristina. 21 abril 2009

Coleccionista de tebeos

Cuatro fabulosas décadas de cómics Marvel. Javier Mesón. 3 de febrero de 2010

Frikimalismo

Marvel Spain. Eduardo Lázaro

El Mundo

Stan Lee. Dioses y monstruos de la casa de las ideas. José María Robles. 2014

La llegada de los Superhéroes Marvel a España

Investigar hoy sobre los inicios de Marvel en España es como luchar contra las hordas de H.Y.D.R.A., por cada interrogante que se despeja aparecen dos más en su lugar y este trabajo es buena prueba de ello, en cualquier caso, transcurridos 46 años y con la información recopilada del Depósito Legal de Barcelona y la Oficina Española de Patentes y Marcas entre otras fuentes, estamos en condiciones de esbozar la reconstrucción de acontecimientos que dieron lugar a la llegada de los superhéroes Marvel a España estableciendo un calendario bastante preciso, aunque advierto que de la gran cantidad de cuestiones relevantes de 1968 y 1969 relacionadas con este importante evento me voy a referir especialmente a las que afecten a la cronología, pidiendo de antemano disculpas, pues debo admitir que algunas discusiones sobre fechas resultan excesivamente prosaicas y de ingrata lectura en algunos fragmentos, pero debemos recordar que es precisamente este el objeto principal del presente artículo. Además de establecer la citada datación abriré algunas líneas de investigación desconocidas sobre la historia de Marvel en España y dedicaremos especial atención al génesis editorial de Spiderman en España que por su importancia voy a tratar un poco más a fondo.

La editorial de Barcelona, Ediciones Vértice se inició en la parcela del cómic a finales de 1964 mediante la fórmula de la novela gráfica definiendo como política editorial no publicar cómics de guerra, western ni espionaje, precisamente los géneros a los que recurrieron todos los editores, veteranos o nuevos, que trabajaron la novela gráfica y además en ese orden. Esta instrucción orientó a Vértice hacia materiales de aventuras con elementos de ficción y fantasía e incluyendo características propias del género de terror, llegando a publicar la primera colección definida como tal en España (Max Audaz). Este planteamiento llevó a la editorial a consolidarse en el mercado español introduciendo a los personajes de ficción procedentes de la compañía inglesa Fleetway, cuyas aventuras se publicaban en su país de origen serializadas en revistas semanales de contenido variado con una cadencia de dos páginas por número y la editorial española rápidamente los fue consumiendo a buen ritmo. En enero de 1967 la Fleetway lanzó las Super Library, ediciones de bolsillo de 128 páginas que ofrecieron un importante balón de oxígeno a Vértice debido a que una de estas Super Library, la llamada inicialmente Fantastic Series y luego Stupendous Series, fue dedicada alternativamente a los personajes Steel Claw y Spider, lo que garantizaba la continuidad de las versiones españolas de Zarpa de Acero y Spider el hombre araña. Los editores ingleses responsables de Fleetway decidieron cancelar las Fleetway Super Library en enero de 1968, incluidas las Stupendous Series y su finalización en el número 26 unida a que el resto de series, Maxwell Hawke, Mytek y Kelly’s eye disponían ya de pocas aventuras inéditas procedentes de los semanarios, ponía en jaque a la editorial barcelonesa que necesitaba con premura nuevas opciones con garantías para continuar su exitosa carrera editorial en la parcela del cómic. Precipitadamente se tomaron tres decisiones en este sentido, la primera fue incorporar otra colección de la Fleetway concretamente de otra Super Library, las Secret Agent Series, y se lanzó a mediados de 1968 la colección “Aquí Barracuda”. Otra decisión fue buscar nuevas fuentes de materiales y se contactó de nuevo con RODIVISA con quien entre otras cosas se habían contratado historias adicionales para Max Audaz y se buscó entre sus productos una serie del perfil deseado por Vértice escogiéndose finalmente “Yeti”, serie que Esteban Vila estaba preparando para el mercado francés y que Vértice acabó lanzando poco después de Barracuda. Como tercera opción se empezó a trabajar también en la traslación de Galaxia Ilustrada a la fórmula extra de 25 pesetas, aunque esta serie no vería la luz hasta principios de 1969.

José Torra, dueño de Vértice, era consciente de que no había hallado el relevo adecuado, eran soluciones dispares e inconexas que además tenían una a una, problemas de fondo. Los materiales de Barracuda eran un parche pasajero pues las Secret Agent series también fueron canceladas en enero del 68 sin embargo el principal inconveniente de esta opción radicaba en que los agentes secretos no encajaban en las directrices de la editorial por ser una solución recurrente de la competencia y solo se acudió a ellos en caso de extrema necesidad como en esta ocasión. Yeti demostraría ser una serie de escasa calidad tanto gráficamente como argumentalmente lo que implicó que solo durase 6 números y de paso se extinguiera la colaboración con RODIVISA, y la opción de Galaxia era obviamente un remedo de otra época, precisamente una de las causas del colapso de la novela gráfica en otras editoriales. La situación requería otras soluciones y es en este contexto cuando se piensa seriamente en los cómics Marvel, cuyo perfil era idóneo para Vértice pues recordemos que los insólitos «héroes» de la Fleetway no fueron otra cosa que el reflejo británico del fenómeno Marvel estadounidense, obtenido con cierto grado de distorsión. En este punto conviene recordar que seguía vigente la prohibición a los superhéroes de la DC en España desde 1964.

Según las indicaciones de Raimon Fonseca (Marvel en España: Una historia. Cap 3.), Fernando Sesén, traductor, guionista y hombre de confianza de la casa, era la persona clave en la editorial encargada de tratar con los editores ingleses y realizar las contrataciones de las series, y fue él quién gestionó las conversaciones con Marvel, los contratos e incluso la selección de colecciones asumiendo a su vez lo que se podría acercar a la figura del primer editor Marvel en España.

El resultado de estas gestiones fructifica a finales de 1968 y se concretan las negociaciones entre Ediciones Vértice y Transworld Feature Syndicate, Inc para contratar los derechos de publicación de las primeras colecciones Marvel propiedad entonces de Magazine Management CO. Como fruto de estos acuerdos se contratan 8 colecciones y se toman las pertinentes decisiones sobre cómo titularlas para el mercado español, siendo la única opción razonable para 1969 traducir los títulos al castellano encargándose de ello de nuevo Fernando Sesén, definiendo como criterio para los productos Marvel presentar las cabeceras en castellano y subtitularlas con el original inglés, siendo Spiderman la única excepción a esta norma que funcionará al revés utilizándose como subtítulo la traducción “El Hombre Araña”. Mas adelante cuando hablemos de Spiderman se entenderá porqué. El resultado es la relación de colecciones y subtítulos aparecidos en la publicidad de las contraportadas de los primeros ejemplares Marvel-Vértice que compondrían el primer lanzamiento Marvel en España:

En sintonía con la política de marcas que Ediciones Vértice ya tenía definida se inicia en el Registro de la Propiedad Industrial el proceso de registro de los nuevos denominativos escogidos para las colecciones Marvel, gestionando las tramitaciones el agente de la propiedad industrial habitual de la editorial, Luis Ruiz Palacios, quien inició los expedientes con las siguientes fechas de solicitud:

28 de noviembre de 1968 – LOS VENGADORES

3 de diciembre de 1968   – LOS CUATRO FANTASTICOS

                                       CAPITAN MARVEL

                                       PATRULLA X

12 de diciembre de 1968 – EL EXTRAÑO DOCTOR

                                       EL HOMBRE DE HIERRO

                                       EL CAPITAN AMERICA

 

 

 

Donde la marca SPIDERMAN no aparece porque Vértice ya había iniciado su registro en 1967 como luego veremos, y para El Doctor Extraño se solicitó el denominativo EL EXTRAÑO DOCTOR como argucia para intentar conseguir el registro que se preveía problemático y efectivamente el intento resultó infructuoso. Estas fechas son indicativas de un punto de inicio en las gestiones sin embargo más allá de cuando el Sr. Palacios tuviera preparados los expedientes para presentarlos, son mucho más descriptivas las autorizaciones realizadas por Josefa Perales Orellana, esposa de José Torra y titular de toda la propiedad industrial de la editorial como medida de precaución habitual entre los editores pequeños y medianos para preservar los títulos frente a los avatares de la empresas. El titular debía autorizar previamente al agente para que pudiera intervenir en el registro en su nombre, siendo las autorizaciones individuales e intransferibles de modo que hubo una autorización para cada expediente. El calendario de fechas de autorización fue el siguiente:

1 de noviembre de 1968 – LOS VENGADORES

LOS CUATRO FANTASTICOS

6 de noviembre de 1968 – PATRULLA X

1 de diciembre de 1968 – CAPITAN MARVEL

EL EXTRAÑO DOCTOR

                                      EL HOMBRE DE HIERRO

                                      EL CAPITAN AMERICA

Lo que nos invita a pensar que las contrataciones se pudieron firmar en dos fases de 4 series cada una. El primer grupo sería inicialmente de tres series contratadas por el mes de octubre de 1968 incluyendo The Avengers, Fantastic Four y donde deberíamos añadir The Amazing Spider-man al ser una de las series más importantes de Marvel y teniendo Vértice la marca en pleno proceso de tramitación la convertía probablemente en la mas deseada por Vértice y por tanto debería estar en el primer lote. Pero mas allá de especulaciones disponemos de un dato objetivo que ratifica que estas tres series fueron las más relevantes para Vértice en el inicio; las tiradas registradas de estas tres colecciones fueron de 16.000 ejemplares y las restantes de 12.000 a excepción de Capitán América. Este primer grupo pasó a ser de cuatro colecciones al sumarse X-Men añadida inmediatamente después. En un segundo grupo se ampliaría la línea con otras cuatro series, firmadas seguramente en el mes de noviembre de 1968 donde se contratarían Captain America, Iron Man, Captain Marvel y Doctor Strange. Quiero recalcar que este posible desglose en las contrataciones es solo una hipótesis a la vista del calendario, en cualquier caso esta división remarcando cuatro colecciones prioritarias y otras cuatro secundarias tuvo efecto en los lanzamientos puesto que la editorial siguió la estrategia de emparejarlas tomando una de cada grupo.

No había precedentes en España de ningún lanzamiento de una línea editorial nueva con ocho series simultáneas y mucho menos en ediciones de este precio que en 1969 aun era revolucionario y no estaba al alcance de casi ningún editor, tampoco había precedentes, ya no en Europa sino en todo el mundo, que un editor introdujese Marvel en un mercado con ocho lanzamientos independientes el primer año. Debo acentuar que la presuposición de que aquello debía funcionar entonces no era en absoluto una certeza y hay que admitir que fue una apuesta muy decidida y resuelta especialmente teniendo en cuenta el precedente de la prohibición a Novaro con los superhéroes de la DC, fuera cual fuera la verdadera naturaleza de esta prohibición. Sin ningún género de dudas fue un momento de gran visión editorial no exenta de riesgo.

Otra cuestión importante sobre el momento de contratación consistió en que ediciones Vértice decidió contratar las series desde el punto en el que adquieren cabecera propia. Esto no será problema con Fantastic Four, Avengers o X-Men que empezaron en USA directamente desde el número 1 pero si en el resto de casos pues muchos personajes Marvel fueron presentados en series genéricas, así en Spider-man se omitirá su origen en Amazing Fantasy nº 15, en Captain Marvel las dos primeras aventuras correspondientes a Marvel Super-Heroes 12 y 13, pero los casos mas perjudicados serán las tres restantes; Captain America e Iron Man perderán en la edición española toda la etapa previa en la serie genérica de Tales of Suspense omitiéndose mas de tres años de historia de ambos personajes, caso similar a Doctor Strange que con este criterio debería prescindir de la cabecera genérica Strange Tales donde se inició su trayectoria obviando una larga etapa de más de 4 años. Desconocemos las razones por las cuales se gestionó de esta forma, tal vez fuera por un criterio de simplicidad a la hora de contratar y publicar, frente a respetar la propia cronología de las series, concepto que era completamente secundario en la época para las editoriales que licenciaban materiales y/o acudían a agencias para nutrirse. Este punto de partida mermará en los casos comentados la disponibilidad de materiales y esta realidad será fundamental para el desarrollo de las colecciones porque la mayoría de decisiones que tomó Vértice respecto a las ediciones Marvel estaban condicionadas por esta cuestión y solo en contados casos tuvieron que ver con un mal funcionamiento de las series.

Entramos en 1969 y la editorial está trabajando en la preparación de las ediciones Marvel que se formalizarán en su formato estrella, la novela gráfica de 128 páginas al precio de 25 pesetas. Fernando Sesén realizó las traducciones y un equipo indeterminado (prefiero dejarlo así de momento) realizó la adaptación al formato novela gráfica y las rotulaciones. Enrique Torres Prats, firmando como Enrich recibió encargo de realizar las portadas de todas las nuevas colecciones asumiendo la responsabilidad de visualizar las primeras interpretaciones de los personajes Marvel, entonces desconocidos por el gran público, iniciando un camino que al poco tiempo fue continuado por Rafael López Espí, escribiéndose una de las principales páginas del portadismo en España.

En febrero de 1969 cristaliza uno de los proyectos alternativos definidos el año anterior y ediciones Vértice lanza la mencionada colección Galaxia Extra, cuando sucede un grave contratiempo, una de las colecciones recién contratadas, Doctor Strange, cambia de periodicidad pasando de mensual a ser bimestral, decidiendo la editorial no publicarla y sustituirla por Daredevil. La cronología de este suceso precisa de aclaración; este cambio se atribuye tradicionalmente a la cancelación en USA de Doctor Strange producida en el número 183 con fecha de portada de noviembre de 1969 sin embargo teniendo en cuenta que en esos momentos el desfase de fechas en Estados Unidos entre la fecha de lanzamiento real y la fecha de portada era de 3 a 4 meses, significa que Vértice no pudo tener constancia de la cancelación hasta agosto de 1969 como muy pronto, mientras que la sustitución ya estaba formalizada de forma fehaciente desde antes del 4 de marzo según el registro del depósito legal como ahora veremos. Necesariamente Vértice tomó la decisión de cambiar de título cuando tuvo noticia del cambio de periodicidad de la colección USA, que pasó a bimestral en el número 181 con fecha de portada de julio de 1969 aunque de hecho con fecha de junio no salió ningún ejemplar y esta información fue conocida por Vértice por febrero de 1969 y alrededor de este mes fue cuando se decidió el cambio. ¿Hasta que punto era decisivo el cambio de periodicidad para Vértice? Era importante en extremo sobre todo teniendo en cuenta que Vértice iba a empezar la serie desde Doctor Strange #169, punto donde el Hechicero Supremo se apoderó de la serie genérica, de hecho cuando Vértice se decidió a publicarla definitivamente a finales de 1970 lo hizo exactamente así. Esto significaba que el material acumulado era solo de 13 comic-books y por tanto no podía garantizarse ni el primer año de la edición, entendiendo que la edición española incluiría dos comic-books por número y en ocasiones incluso tres. Asimismo el cambio de periodicidad no auguraba nada bueno pues normalmente es la antesala de la cancelación, como de hecho así sucedió. La decisión tomada fue suspender el lanzamiento de Doctor Extraño y guardarla en un cajón aunque el cambio fue tan precipitado que no se modificó en la publicidad editorial aparecida en las primeras contraportadas de forma que pasó a ser la primera colección fantasma Marvel-Vértice. La serie escogida para su sustitución fue Daredevil y la decisión tras el problema sufrido con Doctor Strange era la lógica puesto que se recurrió a la serie superheroica disponible con cabecera propia que más recorrido tenía puesto que Daredevil #1 partió con fecha de portada de abril de 1964 (realmente fue lanzada el 27 de diciembre de 1963) lo que de entrada proporcionaba un acopio de materiales de mas de 50 números USA. Ante la dificultad que ofrecía la traducción literal y aprovechando la doble D que lucía el disfraz del personaje, fue presentada por Fernando Sesén como Dan Defensor, una de sus traducciones mas originales y posteriormente controvertidas para el aficionado español. Sin embargo esta nueva contratación no dio lugar a ninguna nueva actuación en el Registro de Patentes y Marcas y el denominativo DAN DEFENSOR no fue solicitado en ese momento siendo probable que esos meses fueran de elevada carga de trabajo en la redacción omitiendo el trámite que se pospuso hasta finales de 1970.

Tras esta modificación de última hora llega el momento de la verdad, es el día 4 de marzo de 1969 cuando la imprenta Lipsia S.A. presenta en la Oficina del Depósito Legal de Barcelona, solicitud para dos obras nuevas registrándolas bajo los títulos “Los cuatro Fantásticos num 1” y “Dan Defensor num 1” siéndoles asignados respectivamente los números de depósito B-11237-1969 y B-11241-1969. Son las primeras solicitudes realizadas al depósito legal español destinadas a publicar una colección de cómics Marvel y debemos tener presente que en ese momento el binomio Vértice-Lipsia trabaja en régimen de depósito legal constante y por consiguiente no constituirá depósitos nuevos para sucesivos ejemplares de estas series aunque si deberá hacerlo cuando inicie otras colecciones distintas. Cumplimentada la primera fase del depósito legal la editorial terminó en primer lugar la preparación del ejemplar de Los 4 Fantásticos el cual estuvo listo definitivamente en el plazo aproximado de un mes hasta que finalmente fue terminado en imprenta el 3 de abril de 1969 y formalizando la segunda fase del depósito se entregaron tres ejemplares en la oficina de Barcelona el 11 de abril de 1969, declarando en este momento una tirada de 16.000 ejemplares. El primer cómic Marvel ya había sido distribuido y el resultado fue que Los 4 Fantásticos vieron la luz en el mes de abril de 1969 con el ejemplar titulado “¡En defensa de la ley!” luciendo en portada una fantástica ilustración de Enrich. ¡¡¡Por fin, en la Primavera de 1969, los superhéroes Marvel habían llegado oficialmente a España!!!

La edición de los 4 Fantásticos abre la primera etapa Marvel en España, periodo que será conocido posteriormente como “volumen 1” y quedará caracterizado por el formato de la novela gráfica, abarcando desde 1969 hasta 1974, año del cambio obligatorio al formato revista por exigencia ministerial a partir del cual se indicarían expresamente los sucesivos volúmenes 2 y 3. Las ocho colecciones que se iniciarán en 1969 llegarán todas a 1974 aunque sus desarrollos discurrirán por senderos muy distintos condicionadas siempre por la disponibilidad de materiales. En este sentido Los 4 Fantásticos será la colección que alcanzaría mayor número de ejemplares, 67, no por iniciarse la primera sino porque partió de materiales desde 1961 disponiendo de mayor remanente que las demás y eso le permitió mantener su periodicidad mas o menos mensual sin contratiempos e incluso a partir de 1973 pudo acelerarla pasándola a quincenal, publicando cronológicamente hasta Fantastic Four #135 a excepción del #15 publicado fuera de orden y omitiendo el #41 recuperado posteriormente en el volumen 3. Tanto en esta como en el resto de colecciones españolas se omitirán los annuals.

Pocas fechas después de este primer lanzamiento, la redacción de Vértice empieza a coger ritmo y el 16 de abril de 1969, Lipsia S.A. solicita número de depósito para dos nuevas colecciones, registrándolas con los títulos “El Hombre de Hierro num.1” y “Patrulla X num. 1” asignando los números B-17341-1969 y B-17345-1969 respectivamente, lo que nos anuncia que Tony Stark con su armadura y los jóvenes mutantes están en camino. Aunque de momento Dan Defensor parece no haber salido todavía.

La llegada del cuarteto fantástico era sin ningún género de dudas un acontecimiento relevante y para encontrar alguna referencia al mismo en su época debemos buscar como casi siempre alrededor del propio Antonio Martín o su entorno. Efectivamente, en el número 2 de su mítico fanzine de información BANG! podemos encontrar la que probablemente sea la primera reseña de un cómic Marvel editado en España. La reseña informa de la presentación del primer ejemplar de los 4 Fantásticos por ediciones Vértice, colección que da título al artículo, el cual desde la mencionada perspectiva es hoy un documento histórico:

La reseña empieza diciendo que es una novedad importante y ciertamente que lo fue, pues en el panorama español del cómic nada volvería a ser lo mismo después de aparecer este ejemplar. E.C. introduce una rudimentaria interpretación de los nuevos superhéroes Marvel muy a tener en cuenta en su contexto. Se comentan las características de la edición resaltando el deficiente montaje con viñetas alargadas y dibujos retocados. Se indica una ligera crítica a la traducción de Sesén señalando que no es ninguna maravilla y finalmente termina preguntándose la posición de la censura frente a los superhéroes recordando que los vetos y trabas a los personajes superpoderosos, siguen vigentes para Superman y sus compañeros de la DC.

Siguiendo la cronología, el ejemplar de BANG! donde apareció la reseña corresponde al 2º trimestre de 1969 aunque sabemos que salió con algo de retraso, en cualquier caso recoge informaciones y noticias entre marzo y mediados de junio de 1969, lo que nos ayuda a constatar que aunque aparentemente el lanzamiento de Los 4 Fantásticos y Dan Defensor fue simultáneo, realmente no fue así, pues en el momento de escribirse la reseña, probablemente por el mes de mayo, solo había aparecido el primer ejemplar de Los 4 Fantásticos, ningún otro de esta u otra colección. El resultado fue que Dan Defensor sufrió retraso, mucho retraso. Hoy podemos confirmar que la edición de Dan Defensor fue terminada el 6 de junio de 1969, tres meses después de solicitado el número de depósito, de modo que la segunda serie Marvel, llegó a España en junio de 1969 con una tirada menor de 12.000 ejemplares pues pertenecía al grupo que hemos definido como series secundarias. De esta forma, con su inclusión accidental y tras una larga espera, Daredevil adoptó un incuestionable protagonismo en las ediciones Marvel españolas, una situación que ya se había dado en Europa puesto que las aventuras de Matt Murdock habían sido escogidas en muchos países nórdicos para introducir Marvel como sucedió en Noruega, Suecia y Dinamarca. Dan Defensor desarrolló su edición cronológica en España sin excesivos sobresaltos siendo el principal reseñable la omisión del 26 al 30 de la serie original de Daredevil probablemente por problemas en el suministro de originales, manteniendo una periodicidad aproximadamente mensual que tuvo que aminorar desde finales de 1972 para regular materiales, alcanzando hasta Daredevil #108 de la edición original al final del periodo del volumen 1 en 1974 con un total de 48 ejemplares. Como curiosidad, Dan Defensor fue la primera colección que tuvo inicio de segunda edición, en 1971, aunque la idea fue abandonada tras solo cuatro números.

Tras culminar este segundo lanzamiento se gestaba el inicio de otro lote, ahora de tres series y solo 6 días después del lanzamiento de Dan Defensor la editorial se decide a iniciar la terna de lanzamientos para el verano en dos fases siendo de nuevo la imprenta Lipsia S.A. la encargada de la gestión y el 10 de junio de 1969 solicitará número de depósito para la obra “Surge el Capitán América” asignándole el B-24581-1969 y solo dos días después, el 12 de junio de 1969 solicitará dos más, “Los Vengadores”, sin especificar título, y “Capitán Marvel. Héroes Apocalípticos” recibiendo respectivamente los números consecutivos B-25028-1969 y B-25029-1969. Con estas solicitudes se han iniciado siete de las ocho colecciones previstas aunque de momento solo han salido dos, pues recordemos que el Hombre de Hierro y Patrulla X aun estaban en proceso desde el 16 de abril y lo cierto es que fueron ultimadas durante el mes de junio. A diferencia con lo ocurrido con las dos primeras, El Hombre de Hierro y Patrulla X siguieron un proceso de producción similar con un calendario paralelo y ambas obras fueron finalizadas casi el mismo día, Patrulla X el 2 de julio de 1969 y El Hombre de Hierro el 3 de julio de 1969. Por consiguiente ambas colecciones fueron presentadas en el mes de julio de 1969, constituyendo el tercer y cuarto lanzamiento Marvel-Vértice.

Aunque su producción transcurrió en paralelo su desarrollo no. Patrulla X se inició desde el principio de la serie USA con X-Men #1 y siguió una periodicidad más o menos mensual hasta agotar la serie original (X-Men #66) a mediados de 1972 con 32 números. La acogida al profesor Xavier y los X-Men originales por los lectores españoles fue excepcional, de hecho tras lanzar 12.000 ejemplares del primer número, la tirada se elevó directamente a 16.000 en el segundo. El resultado fue tan positivo que la editorial decidió iniciar una segunda edición en 1973, la cual es circunstancialmente importante porque si hubiera que escoger un momento figurativo que marcase el final de la era de la novela gráfica en España sería por encima de cualquier otro, la finalización de esta 2ª edición a principios de 1975. También con una tirada de 12.000 ejemplares, El Hombre de Hierro comenzó su trayectoria partiendo desde The Invincible Iron Man #1 y por consiguiente Tony Stark fue introducido directamente con su aspecto de 1968 incorporando su flamante armadura amarilla y roja. Transcurrido poco más de un año de andadura tras publicar el número 13, la serie se detuvo, la editorial echó cuentas y entendió que el ritmo era excesivo para el material disponible, las consecuencias de omitir la etapa de Tales of Suspense fueron por tanto inmediatas, así que se optó por cambiar la periodicidad a bimestral postergando la salida del número 14 hasta 1971. La medida no fue suficiente y a finales de 1973 se alcanzó la producción USA quedando la colección detenida a la altura del número 32 dejando a Tony Stark en el limbo pues la colección lejos de ser cancelada, anunciaba al Dr. Espectrum para el siguiente ejemplar, cosa que sucedió con toda naturalidad casi un año después cuando El Hombre de Hierro retornó con el primer ejemplar del volumen dos en julio de 1974 ya en formato revista.

El mismo día que Vértice terminaba el primer ejemplar de la versión española de Iron Man se produjo un importante acontecimiento, que fue la concesión del denominativo de la marca LOS VENGADORES en un tiempo record de 6 meses, pues se otorgó el 3 de julio de 1969 siendo retirado el certificado del título el día 11 de agosto. Esta resolución establece diversos hitos históricos pues es la primera marca relacionada con una serie Marvel que obtiene el registro en España para la clase 16 de ediciones impresas (hubo un registro previo denominado SPIDERMANN concedido el 23 de enero de 1969 para distinguir tejidos según la clase 42 del antiguo nomenclator oficial) pero además supone la primera marca Marvel registrada para distinguir ediciones impresas en el mundo por un titular distinto de la propia Marvel, al menos que siga vigente en la actualidad. Precisamente será esta serie la siguiente en ver la luz y por consiguiente pasó a ser la primera colección publicada por Vértice con el denominativo en propiedad desde el primer número.

 

Los Vengadores es precisamente el lanzamiento más impreciso de los ocho primeros y esto se debe a que la imprenta Lipsia no hizo depósito de los dos primeros ejemplares, sino que directamente el primer ejemplar depósitado fue el número 3, esta circunstancia es posible porque debemos recordar que Vértice estaba trabajando con el régimen de depósito legal constante aunque esto iba a cambiar muy pronto. El resultado es que solo sabemos que el número 3 fue terminado el 15 de septiembre de 1969 y depositado el 30 de octubre. Recordemos que la solicitud para la colección fue realizada el 12 de junio siendo improbable el lanzamiento en ese mes pues como hemos visto previamente se estaban ultimando Patrulla X y El Hombre de Hierro lanzadas a principios de julio. Estas fechas certificadas dejan una ventana probable de salida del primer ejemplar de Los Vengadores entre julio y agosto de 1969, dependiendo de que supuesto criterio se priorice; si pensamos en un reparto equidistante de lanzamientos el momento más probable sería de mediados a finales de julio de 1969 y significaría a su vez un reparto equidistante de los tres primeros ejemplares, en julio el número uno, en agosto el dos y en septiembre el tercero, pero si pensamos que Los Vengadores siguió un proceso de producción paralelo a su serie gemela en su solicitud de depósito (Capitán Marvel) como ocurrió con la pareja anterior entonces el momento más probable sería agosto como luego veremos. Los Vengadores, como ya sabemos, se encontraba en el grupo de las colecciones prioritarias para Vértice y a tal efecto fue acreedora de una tirada de 16.000 ejemplares. De esta forma culminaba el quinto lanzamiento Marvel-Vértice y los héroes mas poderosos de la Tierra se presentaban en verano de 1969, dando a conocer a los lectores españoles una serie de personajes de enorme trasdendencia del nuevo panteón de héroes Marvel, como el Hombre Hormiga, la Avispa, Rick Jones y pesos pesados como el poderoso Thor y el increible Hulk, traducido por Sesén como la Masa y para desconcierto de los lectores aparecía Tony Stark dentro una armadura totalmente amarilla y mucho menos estilizada que la presentada en su propia serie, era el Hombre de Hierro original con su aspecto de 1963. La colección se desarrolló cronológicamente desde el inicio sin mayores contratiempos salvo algún ligero cambio de orden, llegando al trance de cambio de formato en 1974 con 52 números y publicando hasta Avengers #112, exceptuando el número 9.

Los Vengadores nº 1. Julio/Agosto 1969. Portada: Enrich

Trás Los Vengadores la siguiente colección fue Capitán Marvel cuya edición fue terminada el 25 de agosto de 1969 y podemos asumir que salió a la venta a finales de ese mes completándose el sexto lanzamiento Marvel-Vértice en España. Captain Marvel era una de las últimas incorporaciones en USA, consecuencia de una hábil maniobra de Marvel para conseguir el denominativo de la marca que daba nombre a la compañia aprovechando el paréntesis de uso desde 1953 del Captain Marvel original de la competencia motivado por el litigio entre DC y Fawcett acusándolo de ser un plagio de Superman. El nuevo Captain Marvel de Stan Lee fue presentado en Marvel Super-Heroes #12 el 14 de septiembre de 1967 (fecha de portada, dic-67) y Marvel solicitó rapidamente el registro de la marca el 25 de octubre de 1967 consiguiendo la concesión el 9 de junio de 1970. Cuando DC quiso reactivar el personaje en 1972 se encontró que ya no podía utilizar su nombre de siempre porque pertenecía a Marvel y decidió renombrarlo como Shazam. Mientras en Estados Unidos en Marvel se felicitaban por su eficaz gestión al conseguir la marca, en España, Vértice haría lo propio. La versión española de Captain Marvel es incuestionablemente la serie de menor relevancia de las ocho seleccionadas por Vértice considerando su escaso peso específico dentro del contexto del nuevo Universo Marvel, sin embargo esta elección fue inconscientemente una de las colecciones más importantes de todas las contratadas por Vértice estratégicamente hablando y lo fue porque tuvo como primera consecuencia la solicitud de la marca CAPITAN MARVEL como ya hemos visto, que finalmente fue resuelta positivamente. La incorporación del término MARVEL a la propiedad intelectual de Vértice tendrá consecuencias decisivas en el desarrollo de la historia de Marvel en España.

Cuando Vértice firmó el acuerdo contractual de esta serie habría acumulados solo una docena de números y el horizonte era muy corto, sin embargo es comprensible que se tuviera en consideración incorporar este personaje puesto que a pesar de ser una serie nueva, al distinguirlo con el mismo nombre de la editorial americana le daba mucho crédito y supuestamente iba a ser uno de los nuevos pilares de Marvel aunque finalmente no fuera así. En cualquier caso Vértice la encasilló en el segundo grupo y la edición española se inició con una tirada de 12.000 ejemplares partiendo desde Captain Marvel #1 y ya desde 1969 tuvo que empezar a dosificar el escaso material disponible cuando se encontraron la sorpresa de que la serie original quedaba temporalmente paralizada a la altura del número 19 (dic-69) para quedar cancelada en el número 21 (ago-70) con lo que Vértice solo pudo publicar 8 ejemplares quedando la colección suspendida en el limbo. Todas las precauciones que la editorial barcelonesa había tomado para subsanar contratiempos como el del Doctor Extraño no habían servido para nada y su principal temor se había consumado a las primeras de cambio al tener que detener una colección casi al inicio por falta de materiales. José Torra y su equipo que ya tenían cierta experiencia en gestionar los imprevistos de comercializar productos de otras editoriales, especialmente de Fleetway, empezaban a atisbar que publicar cómics Marvel iba a ser una tarea de gran complejidad y que algunas directrices escapaban a su control. La paralización de la colección Capitán Marvel al año de iniciada, y producida a mediados de 1970, supuso la primera publicación Marvel-Vértice afectada de esta circunstancia. En septiembre de 1972, Marvel reactivó la serie iniciándose la gloriosa etapa de Jim Starlin y Vértice reaccionó de inmediato lanzando a finales de ese mismo año el número 9 después de dos años y medio de desaparición como sino hubiera sucedido nada. A partir de aquí se convirtió en una publicación casi simultánea a la edición americana que básicamente fue bimestral lo que condicionó a la edición española a ser cuatrimestral al llevar dos comic-books por número y así hasta su número final, el 13. Esta fue la extraña trayectoria del Capitán Marvel en el volumen 1 y el porqué la colección empezó en 1969 como el resto, acabó en 1974 como el resto y alcanzó solo 13 números, y de nuevo el condicionante fue siempre la disponibilidad de materiales.

Entramos en el mes de septiembre y tras concretar seis lanzamientos llama la atención que la imprenta solo ha formalizado un único depósito, el de Los 4 Fantásticos realizado en abril. Finalmente Lipsia se decide a regularizarlos o tal vez fuera requerida a ello puesto que en tres casos se había superado el plazo legal máximo de 4 meses para el depósito y con fecha del 9 de septiembre de 1969 se cumplió con la segunda fase del depósito entregando los ejemplares de las colecciones de Dan Defensor, Hombre de Hierro y Patrulla-X todos conjuntamente el mismo día y muy poco después entregó los ejemplares correspondientes al Capitán Marvel (de Los Vengadores como ya se ha comentado no se hizo depósito de los dos primeros números). Es precisamente este el momento de retomar el debate de la postura de la censura. Desconozco si los nuevos cómics de superhéroes tuvieron algún tipo de problema con la censura española desde el momento que Vértice presentara el primer ejemplar de Los 4 Fantásticos para su aprobación siendo muy posible que el gran retraso en la salida de la segunda serie, Dan Defensor, tenga que ver con esta cuestión, en cualquier caso lo que resulta evidente es que finalmente Ediciones Vértice salió airosa del envite y los superhéroes Marvel pudieron continuar, no habiendo aparentemente más manifestaciones prácticas de actuación de los órganos reguladores del ministerio sobre estas ediciones, sin embargo hubo algo más. El depósito legal, inocuo en su definición respecto a los contenidos de las publicaciones, estuvo supervisado por el Ministerio de Información y Turismo al menos en la parcela de los cómics, particularmente en las publicaciones infantiles y juveniles, donde el impresor como paso previo a solicitar/inscribir un nuevo depósito de una publicación debía aportar a los funcionarios la correspondiente autorización o certificación ministerial acreditando la condición de publicación infantil/juvenil que implicaba a su vez la consideración de publicación periódica en cuyo caso atendiendo al artículo quinto del reglamento del Depósito Legal se podía consignar número de depósito por una sola vez para toda la serie, lo que aquí he identificado como régimen de depósito legal constante. En caso de no disponerse de la mencionada autorización, los impresores debían solicitar número de depósito independiente para cada ejemplar, como así debía hacerse en las publicaciones calificadas “para mayores” o “para adultos”, sin embargo en los años 60 en Barcelona podemos encontrar diversas editoriales/colecciones que no seguían esta pauta, publicando cómics calificados para adultos empleando el mismo número de depósito legal, como de hecho estaba haciendo Vértice hasta este momento. Esto se debió a varias razones, en primer lugar porque este seguimiento fue complicado de llevar a cabo de modo exhaustivo en Barcelona dado la gran cantidad de editoriales y publicaciones existentes, en segundo lugar porque muchas colecciones consolidaron depósito antes de iniciarse este control, y por último y lo más importante porque no todos los cómics calificados “para adultos” por los editores tenían la misma consideración desde el punto de vista de la censura que tenía establecida su propia escala y algunos géneros eran “más adultos” que otros como por ejemplo el terror.

El hecho es que fue precisamente a partir de la entrega de estos ejemplares de las 4 colecciones mencionadas que se produjo el cambio de criterio en la oficina del depósito legal de Barcelona respecto a las novelas gráficas de ediciones Vértice para las nuevas series de superhéroes. A partir de aquí la editorial barcelonesa pasó al régimen de depósito legal variable y tuvo que gestionar número de depósito ejemplar a ejemplar para todas sus colecciones ratificando expresamente que dichos materiales quedaban enmarcados como series numeradas de publicaciones según el reglamento, dándoles el mismo tratamiento que a libros y novelas de modo estricto. Podemos pensar que como balance fue una consecuencia muy laxa para lo que podía haber sido, recordemos los precedentes de los superhéroes de la DC editados por Novaro, y tengamos en cuenta que la análoga comisión francesa terminó por prohibir las colecciones Fantask (1969) y Marvel (1970) en Francia. Este suceso se enmarca como un capítulo más en el calendario específico de acciones que culminarían con el cambio de formato generalizado de 1974, marcando el final de la novela gráfica.

Aun estaba en preparación Capitán América, correspondiente a los depósitos solicitados en junio, que tradicionalmente siempre ha ocupado el 5º lugar en el orden de lanzamientos puesto que su número de depósito es anterior el de Vengadores y Capitán Marvel, sin embargo la realidad es que fue la séptima colección Marvel en España. Poco más de un mes después de salir Capitán Marvel, fue finalizada la edición del primer ejemplar del Capitán América, el 30 de septiembre de 1969. Puesto que los datos aportados por la oficina del depósito legal de Barcelona hacen referencia a la fecha de terminación, debemos suponer que la fecha de circulación o distribución debe ser considerada inmediatamente después por consiguiente ubicamos el lanzamiento del Capitán América a principios de octubre de 1969. El Capitán América era otro de los personajes representativos del nuevo Universo Marvel y finalmente la Editorial Vértice decidió iniciar la serie con una tirada de 16.000 ejemplares a pesar de estar ubicada en el segundo grupo y tuvo exactamente el mismo problema que el Hombre de Hierro, la omisión de la etapa de Tales of Suspense, arrancando en Captain America #100 (abr-68) lo que propició que al año siguiente tras el número 12, la colección ralentizara su ritmo pasando a una cadencia bimestral y en este punto se experimentó incluso con recuperar historias de Tales of Suspense (números 11 al 13) aunque se abandonó la idea y para el lector español quedaba claro que hubo algo antes de los episodios en curso. En cualquier caso la dosificación del remanente de aventuras fue ligeramente mejor gestionado que en el caso de El Hombre de Hierro, por esta razón la colección no se interrumpió aunque pasó algunos baches, alcanzando 36 números antes de ser sustituida en septiembre de 1974 por el volumen 2. El volumen 1 publicó hasta Captain America #172 (excepto el #106).

En la España de los últimos años del régimen y el post-franquismo gran parte de la incipiente crítica de la historieta se ensañó con los superhéroes Marvel escenificándolos como ejemplo del imperialismo americano, la alienación en el cómic, el colonialismo cultural, etc. Este posicionamiento en clave política quedó personificado especialmente en el Capitán América, el vengador abanderado, que fue tachado habitualmente como personaje fascista. A esta corriente de opinión se unirá también la concepción crítica de la consideración de los superhéroes como subproducto y/o subcultura siendo habitual la coincidencia en ambos grupos de opinión, el político y el cultural quedando el segundo condicionado generalmente por el primero y subyaciendo la obsesión por intentar canalizar a los lectores hacia otro tipo de cómics. Afortunadamente la respuesta de los lectores españoles estuvo muy por encima de todas estas opiniones y los superhéroes Marvel se introdujeron en España con gran éxito.

Aun faltaba lanzar Spiderman, que estaba incluida en la planificación desde el primer momento y a tal efecto figuró siempre en todos los checklist de las contraportadas y en mi opinión debió formar pareja de lanzamiento con Capitán América. Pero entramos en octubre y la editorial de momento no da señales de iniciar la colección arácnida, ni siquiera se ha acudido al depósito legal para ponerla en marcha mientras las otras siete ya están literalmente en los kioscos, síntoma de que sucede algo extraño. Sabemos además que Spiderman no solo era un título capital del nuevo Universo Marvel, lo era también para Vértice. ¿Qué pasaba con Spiderman?, ¿Por qué motivo no se lanzaba esta colección y se demoraba de forma aislada?

Efectivamente había algún tipo de problema con Spiderman, un problema que desde la perspectiva de la editorial precisaba ser resuelto antes de iniciarla. Este problema tenía que ver con el Spider británico y se originó a principios de 1967. Puesto que este es uno de los momentos clave para entender la edición española de Spiderman en España vamos a retroceder en el tiempo y entrar en el detalle.

En enero de 1967, previo acuerdo con la Fleetway, Ediciones Vértice inició la publicación de las aventuras de Spider, el antihéroe creado por Ted Cowan y Reg Bunn que pasó a engrosar la importante línea de colecciones británicas de Vértice, solo que la editorial barcelonesa tuvo la idea de presentar esta colección bajo la cabecera de Spiderman. Ediciones Vértice encargó la impresión en los Talleres G. Lecas, empresa que solicitó depósito legal el 4 de enero de 1967, lanzándose ese mismo mes en fecha indeterminada. Entre Marvel y Fleetway había entonces buena sintonía y Odhams Press, una editorial perteneciente al mismo grupo británico, había obtenido recientemente licencias para publicar los superhéroes Marvel dentro de la fórmula del semanario en formato tabloide típica del mercado inglés, serían los llamados Power Comics. Precisamente en enero de 1967 Odhams Press había presentado a Spiderman en la nueva revista Pow! con fecha de portada del 21 de enero de 1967, siendo esta edición muy próxima en el tiempo a la comentada anteriormente del Spiderman de Vértice. Que existiera una publicación en España con las aventuras del Spider británico bajo la cabecera del Spiderman norteamericano era una situación totalmente indeseada tanto para Fleetway como para Marvel.

Es bastante improbable que Marvel interviniera en este problema, al menos directamente pues en esos momentos Marvel no tenía ninguna potestad en España sobre nada y menos sobre Vértice, por no tener aun no tenía registradas las marcas de sus personajes en Estados Unidos, solo las tenía en Reino Unido desde 1965 pero exclusivamente para el territorio británico. A principios de 1967 cuando Vértice lanzó esta colección, la marca SPIDERMAN no existía aun en España y por tanto el denominativo no pertenecía a nadie cuando surgió este conflicto. Pero quien si tenía fuerza sobre Vértice era la Fleetway, de hecho todo el éxito de Vértice se sustentaba en la explotación de sus productos y desde el punto de vista británico, Vértice estaba desvirtuando a su personaje arácnido al rebautizarlo como Spiderman. Este problema se planteó inmediatamente después del lanzamiento del primer ejemplar del Spiderman español, a finales de enero ó en febrero de 1967, cuando la Fleetway (tal vez secundada por Marvel) manifestó a Vértice su disconformidad con la utilización de esta cabecera, y aunque no sabemos que argumentos de presión utilizó, es claro que se le solicitó el cambio de título, pero hubo algo más; se planteó a Vértice algún tipo de incompatibilidad con la cabecera Spiderman para poder seguir publicando Spider. El Sr. Torra consciente de su dependencia absoluta de los materiales de la Fleetway se sometió a sus peticiones y accedió a cambiar el título y a aceptar la mencionada incompatibilidad. Posteriormente se producirán situaciones similares en Italia y Francia donde publicarán las aventuras del Spider británico inicialmente bajo la cabecera Spiderman y finalmente acabaron por cambiar el nombre al personaje aunque con bastante menos premura que en España, de todas formas el caso más significativo fue el español por ser el primero y por sus consecuencias, puesto que esta petición tendría una inmediata reacción por parte de Vértice.

Asumiendo el problema, Ediciones Vértice se puso en marcha y empezó a actuar. Puesto que en España no existía registro de la marca SPIDERMAN y resultaba obvio que era un denominativo importante, el primer paso fue intentar registrarlo. Según Raimon Fonseca, fue sugerencia de Fernando Sesén el iniciar el registro de la marca SPIDERMAN (Marvel en España: una historia, cap.2. Spiderman 48), a esto lo único que tengo que añadir es que la motivación de esta iniciativa fue este conflicto concreto y que el Sr. Torra ya tenía entonces cierta experiencia con la gestión de las marcas y alguna muy amarga, lo que no es incompatible con la información aportada por Fonseca. Para formalizar el registro el Sr. Torra buscó un nuevo agente de la Propiedad Industrial, la persona que le había gestionado estos asuntos hasta la fecha era José Bonet Del Río y venía trabajando con él desde la época de Cenit, la editorial predecesora de Vértice. O bien quedó insatisfecho de gestiones anteriores o bien buscó otro profesional que a su juicio le ofreciese mejores garantías, lo cierto es que se contactó con Luis Ruiz Palacios, un agente con el que José Torra había tenido contacto anteriormente a propósito de la marca GALAXIA propiedad de Manuel Rollán. Este paso evidencia a su vez que el Sr. Torra era consciente de que iniciaba un camino delicado y que podía ser un tema de cierta envergadura.

 

El 1 de marzo de 1967, Palacios recibió la autorización para iniciar el expediente SPIDERMAN, que fue solicitado el 30 de marzo de 1967 dentro de un lote de 6 marcas todas a nombre de Josefa Perales Orellana. Este registro supone el segundo para ediciones de la marca SPIDERMAN realizado en todo el mundo después del mencionado registro en UK. Marvel inició sus registros en Estados Unidos a partir de julio de 1967 y concretamente THE AMAZING SPIDER-MAN el 10 de agosto de 1967 por lo que el registro español es anterior al estadounidense aunque cada uno circunscrito a su propio país. A continuación Vértice se puso en marcha con el cambio de título. No podemos saber con exactitud en que momento se cedió ante la Fleetway y se aceptó el cambiar de cabecera siendo muy probable que se aceptara en fecha previa al cambio efectivo y se pidiera un plazo de tiempo para formalizarlo, lo que si puedo determinar con exactitud es que el cambio se ordenó a finales de mayo de 1967, cancelando Spiderman a la altura de su número 10 e iniciando una nueva colección que pasará a llamarse Spider, el hombre araña, título más acorde con el Spider original británico y de paso se aprovechó la circunstancia para transformarla en el nuevo formato Extra de 25 pesetas, realizándose el cambio en la redacción entre junio y julio de 1967, solicitando depósito para el primer ejemplar del nuevo título el 3 de julio de 1967 (algunas claves de esta transformación las expliqué en Fans Fun Magazine nº 55).

Pero aquí no acabaron las medidas o tal vez debiéramos decir las contramedidas; una vez finalizada la reestructuración de Spider, a continuación Vértice inició registro del resto de títulos de la Fleetway que tenía en publicación, excepto ZARPA DE ACERO que ya obraba en su poder, firmando las autorizaciones el 10 de noviembre de 1967 y solicitando los denominativos el 28 de noviembre de 1967, incluyendo MYTEX EL PODEROSO, OJO MAGICO, MAX AUDAZ y por supuesto la nueva denominación SPIDER EL HOMBRE ARAÑA. Lo mejor de todo es que esta última marca era todavía mucho más potente que la propia SPIDERMAN.

Después de este pequeño flashback volvamos a 1969 y veamos que significó todo esto. La gestión de Vértice fue extremadamente precavida y tuvo mucho cuidado de estirar las series Fleetway mientras introducía Marvel para no cerrarse las puertas al material ingles antes de verificar que los superhéroes Marvel funcionaban y conseguir una transición correcta y reversible si fuera necesario. Sin embargo la editorial se trazó una agenda de trabajo totalmente distinta para Spider, el hombre araña con el objetivo de finalizar la serie lo antes posible, acelerando su ritmo de publicación. De este modo López Espí, que tenía asignadas las portadas de esta colección, siguió un calendario de fechas de entrega mucho más exigente entregando la última el 24 de mayo de 1969 mientras que el resto de series base, Mytek, Max Audaz, Kelly y Zarpa se alargaron sobre todo las tres primeras con una lenta cadencia, casi angustiosa, hasta bien entrado 1970. Con este objetivo, por el verano de 1969 quedaría agotado todo el material disponible de Spider dando por terminada la colección en el número 27. Esto fue así porque Vértice no podía tener ambas colecciones arácnidas en publicación simultáneamente y por tanto antes de iniciar Spiderman se vio obligado a cancelar Spider, y este requisito como hemos visto venía del compromiso previo adquirido en 1967. Además de terminar la serie, la editorial barcelonesa tomó otra precaución que fue anunciarlo y se insistió en dejarlo claro en la publicidad editorial y con el lanzamiento del primer ejemplar de Los Vengadores se actualizaba a modo de checklist la relación de series en curso, diferenciando dos grupos, en el primero, arriba en rojo, relacionando las nuevas 8 series Marvel donde Dan Defensor ya sustituía al Doctor Extraño y abajo en azul aparecían las series Fleetway vigentes donde ya no constaba Spider. Este diseño de contraportada se vio por primera vez por julio/agosto de 1969 y a partir de aquí se insistió en él en todas las series durante muchos meses constatando que Spider ya no era una serie en curso.

Los Vengadores nº 1. Contraportada

 

¿Si estaba solucionado el problema desde julio/agosto porqué a principios de octubre aun no se empezaban las gestiones de Spiderman en el depósito legal? ¿Qué más faltaba?

La primera cuestión es determinar cuándo se hizo efectiva la terminación de la colección Spider. Una cosa son los checklist publicitarios de la editorial y otra cosa muy distinta es el calendario real. La datación del último ejemplar de Spider el hombre araña, el 27, no es posible obtenerla a través del depósito legal porque de forma anómala no lleva impreso depósito legal alguno y habría que preguntarse si esto fue intencionado pues todo apunta que el ejemplar no fue presentado en la oficina. Sin embargo es posible obtener una estimación indirecta a través de los ejemplares publicitados en las contraportadas de los últimos ejemplares de la serie y podemos aproximar que la colección se terminó de forma efectiva a finales de septiembre / principios de octubre. Efectivamente el ritmo impuesto en el último tramo era muy exigente, correspondía a una cadencia quincenal y la editorial hizo lo que pudo con toda la premura posible pero aún así hubo un desfase de dos a tres meses entre lo publicitado y la realidad de la finalización lo que viene a ratificar de nuevo una intención predefinida en la cancelación de la serie Spider.

Pero aun asumiendo que la editorial esperó de forma estricta para evitar la simultaneidad de las dos series arácnidas, todavía hay una cuestión importante, tal vez solo fuera uno de esos caprichos del destino pero lo cierto es que coincidió con otro acontecimiento de gran relevancia de tal forma que resulta difícil pensar que pudiera ser fruto de la casualidad. ¡¡¡El calendario de fechas sugiere que Vértice esperó en primer lugar a tener la concesión de la marca SPIDERMAN antes de iniciar su edición y que esperó en segundo lugar a disponer del correspondiente certificado antes lanzarla!!!

El denominativo SPIDERMAN estaba en tramitación desde marzo del 67 y por consiguiente era lógico pensar que dicho expediente debería estar muy avanzado pues los reparos presentados en su día fueron solucionados hacía ya año y medio. Finalmente, el expediente fue resuelto favorablemente el 22 de septiembre de 1969 con la particularidad de añadir “J. Perales – Barcelona” al denominativo como consecuencia de subsanar el mencionado reparo anterior, con lo que la marca era definitivamente propiedad de Josefa Perales Orellana. Solo faltaba esperar el trámite burocrático correspondiente a expedir la certificación.

Se produce una coincidencia en el tiempo entre las fechas de la resolución de la marca con la finalización de la serie Spider. Fuera cual fuera el desencadenante definitivo lo cierto es que con fecha del 18 de octubre de 1969, Lipsia SA solicitó depósito para el primer ejemplar de Spiderman, siendo asignado el número B-39330-1969 con el título “Se presenta Spiderman” lo que significaba que por fin se había dado luz verde a la colección arácnida tras un complejo periplo de casi un año desde su contratación. Pero el haber esperado hasta octubre para iniciar la serie estrella no era precisamente la situación ideal, pues por estos días se iniciaba también la edición del 5º ejemplar de 4 Fantásticos y Dan Defensor, el 4º número de Patrulla-X, Hombre de Hierro, Vengadores, Capitán América y el 3º de Capitán Marvel, obviamente el retraso acumulado era muy alto generando un gran desfase con el resto de series y había que intentar recuperar el tiempo perdido de modo que se puso en marcha un segundo ejemplar de Spiderman solo trece días después del primero y el 31 de octubre de 1969 Lipsia SA solicitó un nuevo depósito para la obra titulada “El extraordinario Hombre de Arena” que recibió el número de depósito B-40882-1969. A pesar de la evidente prisa, aún hubo que esperar casi dos meses hasta que la edición se materializara encargándose la impresión de estos dos ejemplares para la segunda semana de diciembre. La imprenta Lipsia los terminó el primero el 13 de diciembre de 1969 y el segundo el 11 de diciembre de 1969 con tiradas de 16.000 y 15.000 ejemplares respectivamente, precisamente en las mismas fechas en las que el certificado de la marca SPIDERMAN estuvo listo y Luis Palacios firmó la recepción el día 16 de diciembre de 1969. Lo incuestionable es que en diciembre de 1969 se materializó la octava y última colección Marvel-Vértice, de modo que en las navidades de 1969 los lectores españoles se encontraron por partida doble con una importante sorpresa en los kioscos, el lanzamiento del sorprendente Spiderman con los dos primeros ejemplares, iniciándose una serie que en muy poco tiempo se convertirá en uno de los comics más icónicos de nuestro país.

La publicación de Spiderman reutilizó el diseño de cabecera de 1967 y en el volumen 1 alcanzó 59 números incluyendo desde Amazing Spider-Man #1 al #131 siendo omitidos los números originales 21 al 23, 25, 26 y 29, los cuales fueron recuperados posteriormente en el volumen 3 excepto el 29 cuyos materiales de reproducción estaban extraviados en Marvel. Spiderman también emprendió una segunda edición en 1973, ofreciendo síntomas evidentes de ser la colección Marvel que mejor progresó de todas en esta primera etapa, coexistiendo la primera y segunda edición simultáneamente en los Kioscos, la cual en principio solo alcanzó 23 números al verse truncada por el cambio de formato, marcando su interrupción el momento en que la 2ª edición de Patrulla X fue completada, por esta razón el número 32 de la 2ª edición de Patrulla X es el ejemplar que marca la consumación de la extinción del volumen 1 de Vértice y por extensión un punto y aparte en la edición de la novela gráfica en España.

	Autoriz.	Solicitud	Solicitud	Depósito		Mes de		Depósito	Resolución Marca
	Marca	Marca	Dep. Legal	Legal	Termin.	salida	Tirada	ejemplares
4 FANTASTICOS	1-11-68	3-dic-68	04-mar-69	B-11237-69	03-04-69	Abril	16.000	11-abr-69	15-jun-71	CONCEDIDA
DAN DEFENSOR	4-11-70	25-nov-70	04-mar-69	B-11241-69	06-06-69	Junio	12.000	09-sep-69	4-feb-74	DENEGADA
HOMBRE DE HIERRO	1-12-68	12-dic-68	16-abr-69	B-17341-69	03-07-69	Julio	12.000	09-sep-69	20-oct-72	DENEGADA
PATRULLA X	6-11-68	3-dic-68	16-abr-69	B-17345-69	02-07-69	Julio	12.000	09-sep-69	15-jun-71	CONCEDIDA
VENGADORES	1-11-68	28-nov-68	12-jun-69	B-25028-69	*	Jul/Ago	16.000	*	03-jul-69	CONCEDIDA
CAPITAN MARVEL	1-12-68	3-dic-68	12-jun-69	B-25029-69	25-08-69	Agosto	12.000	16-sep-69	15-jun-71	CONCEDIDA
CAPITAN AMERICA	1-12-68	12-dic-68	10-jun-69	B-24581-69	30-09-69	Octubre	16.000	20-nov-69	11-jun-71	CONCEDIDA
SPIDERMAN	1-03-67	30-mar-67	18-oct-69	B-39330-69	13-12-69	Diciem.	16.000	08-ene-70	22-sep-69	CONCEDIDA

Calendario esencial de los primeros ejemplares de los ocho lanzamientos Marvel de 1969 en España ordenados por fecha de salida

(*) Los Vengadores nº 3. Terminación: 15-9-69. Depósito: 30-10-69

Debo insistir sobre la cuestión del registro de marca, pues en condiciones normales no debería haber supuesto ningún problema iniciar la colección sin el certificado y aun más, sin ni siquiera tener la marca como en las otras colecciones, por consiguiente, pudo ser solo una coincidencia o simplemente que Vértice quisiera tener el documento en su poder por si fuera necesario tener que esgrimirlo en su defensa. Marvel no tuvo ninguna interferencia en este tema y de hecho lo más probable es que desconociese en esos momentos las gestiones que Vértice había realizado en el Registro español y la confirmación sencilla está en las propias acreditaciones de los primeros comics Marvel-Vértice:

Debemos resaltar la última línea donde se indica:

Todos los títulos originales son propiedad de MARVEL COMICS GROUP.

Supongo que este texto ha dado pié a algunos investigadores a considerar que Vértice vendió a Marvel la marca SPIDERMAN en 1969 e incluso en el contexto de 1967. Ambas apreciaciones son erróneas y las transacciones de compraventa fueron todas posteriores. Esta es una cláusula contractual que Marvel obligaba a poner en los créditos de aquella época a sus licenciatarios, al menos a los españoles, manifestándoles que los títulos originales eran de su propiedad. La política inicial de marcas seguida por Marvel en España fue en extremo negligente y esta frase tal cual se especifica en los créditos era una verdad a medias debido a que la propiedad de los títulos no es universal y está sujeta a territorialidad de modo que en 1969, Marvel era propietaria de estas denominaciones en Reino Unido y Estados Unidos y solo dos o tres de ellas en Australia y Alemania siendo posible que hubiera algún país mas, pero era una afirmación completamente falsa en España, donde Marvel no era propietaria de los mismos ni en inglés, ni en castellano, … de hecho como ya hemos visto algunos ya eran de Vértice y otros estaban en camino, y respecto a SPIDERMAN además de este, el 7 de julio de 1970 obtuvo también la concesión del título de propiedad de SPIDER EL HOMBRE ARAÑA, con lo que era imposible que ningún editor publicara en España una cabecera arácnida sin permiso de Vértice pues todas las variantes le pertenecían. Pero todavía más importante si cabe fue el hecho de que Vértice consiguió la concesión de CAPITAN MARVEL, un título cuya posesión obligaría a la todopoderosa Marvel a postrarse de rodillas aunque adoptar estas posiciones de ventaja al final tendría nefastas consecuencias, entre ellas que finalmente entrara Bruguera en juego. Ante la cláusula, el Sr. Torra entendiendo que los derechos de los títulos eran suyos, asintió en incluirla sin poner objeción alguna y poco a poco siguió registrando nuevos títulos relacionados con el Universo Marvel, dejando que los abogados de Marvel siguieran con su política contractual pseudo-infantil sobre derechos de propiedad intelectual en España, confiados tal vez en que la posesión del Copyright de los personajes les amparara internacionalmente en las marcas. Por su parte, Vértice se estaba asegurando de forma indirecta unos derechos de exclusividad en España sobre las cabeceras Marvel sin que figurase nada de esto en los contratos y sin que los abogados de Marvel lo sospecharan. Evidentemente esto no acabó aquí y fue el principio de una complicada relación de mutua dependencia entre ambos que dio lugar a una de las historias más apasionantes relacionadas con los superhéroes Marvel que se haya producido en nuestro país, la guerra Marvel-Vértice por conseguir el dominio de las marcas sobre los personajes Marvel en España y que acabó, tras muchos episodios, en los tribunales de New York 10 años después como consecuencia de la demanda civil interpuesta por Cadence Industries contra Ediciones Vértice. La guerra de marcas entre Vértice y Marvel no tiene equivalente en ningún otro país del mundo y explica muchos de los interrogantes pendientes de resolver hoy sobre la historia de Marvel en España.

                                                                                                          Joaquín Alapont Ribera

Valencia a 1 de diciembre de 2015

Agradecimientos

Ángel Bueno, Agustín Mansilla, Manuel Barrero, Rafael López Espí, Enrique Torres Prats, al personal de los departamentos de Archivo, Difusión e Histórico de la Oficina Española de Patentes y Marcas especialmente a María Jesús Berzal Tejero Jefa del Servicio de Archivo, al personal de la Oficina del Depósito Legal de Barcelona especialmente a Gisela Cabarrocas Guardiola Jefa de Sección de Coordinación de las Oficinas del Depósito Legal de Cataluña.

ADVERTENCIA LEGAL:

La publicación de imágenes de documentos incluidos en este artículo, de los que es propietaria la Oficina Española de Patentes y Marcas, se ha realizado exclusivamente con fines de estudio o investigación, sin finalidad lucrativa, según lo dispuesto en la Ley de Propiedad Intelectual, aprobada por el Real Decreto Legislativo 1/1996, de 12 de abril, modificada por la Ley 23/2006, de 7 de julio, que regula y armoniza las disposiciones vigentes sobre la materia. Las citadas imágenes han sido cedidas para esta publicación por la OEPM.