La tercera edición de la madrileña Heroes Comic Con ha arrancado, según anuncia la organzación, batiendo su récord de asistencia en su primera jornada. Y debe ser cierto, a juzgar por el llenazo de su primera charla marvelita, dedicada al actual relanzamento mutante, con los dibujantes de Potencias de X, el brasileño R.B. Silva, y Patrulla-X: Merodeadores, el italiano Matteo Lolli, y el editor Marvel en España, Julián Clemente, como maestro de ceremonias. Sentados junto a sus traductores sobre un apropiado asiento de aspecto vegetal, cual hábitat de Krakoa:
El seísmo de Dinastías de X #2 sacudía aún a la audencia cuando Clemente confesó que hacía años que ningún cómic le ha transmitido tal urgencia por leer el siguiente número. Y precisamente el subsiguiente escenario, al filo del spoiler pero sin llegar a cortarse, y sobre todo su proceso interno, centró el grueso de la charla, así como las preguntas de los asistentes.
Comenzando por la producción de dos series quincenales alternas (en su publcación U.S.A.), en el caso de Silva, y las cinco de que se compone el posterior «Amanecer de X«, en el de Lolli. La necesaria coordinación no implica una mayor planificación gráfica, descartó el brasileño, al asegurar sorprenderse al mismo ritmo que los lectores, recibiendo los guiones de Jonathan Hickman al mismo tiempo que los dibuja. Si bien implicó muchos más ojos pendientes de cada pequeño desarrollo,.en su primera fase, ralentizándola inevitablemente, pese a arrancar con seis o siete meses de adelanto. Similarmente, el italiano lamenta el tiempo perdido en buscar recursos, al tener que simultanear el trabajo de varios dibujantes paralelamente, retrasos incluidos. Aunque Silva describe mucho más positivamente al respecto su colaboración con Pepe Larraz (a cargo de Dinastía de X). Acaso porque ya era fan suyo antes, cruzándose las páginas de uno a otro como referencia prácticamente en tiempo real. Además de agradecer el respaldo profesional tanto del editor como por parte del público en el que siente como su salto al estrellato tras Patrulla-X Azul y Oro.
Ambos comenzaron dibujando profesionalmente en papel y se pasaron al formato digital por razones de eficiencia, destacando concretamente Lolli la mayor rápidez a la hora de realizar cambios. Pese a lo cual pretende volver al método tradicional porque siente que pierde a cambio bastantes detalles, aunque los plazos de los sucesivos encargos son tan cortos que no alcanza a acometer la transición. El paso al digital para Silva fue sobre todo una cuestión de mentalizarse, pero era necesario para ganar más tiempo social y familiar. Ambos coinciden en que lo más complicado son los plazos, incluso señalando su respectiva confianza con Jonathan Hickman y Gerry Duggan a la hora de poder enviar directamente las páginas finales sin necesidad de aprobar los borradores.
Centrándonos en Potencias de X, R.B. Silva aclaró que trabajó cada una de sus tres épocas, presente, dentro de cien y dentro de mil años, como una historia separada. Su preferida es la de dentro de mil, porque le permite más libertad creativa, mientras que la actual le requiere requiere de mucha más investigación. Aunque la más difícil de diseñar fue la de dentro de cien, porque las cosas tienen que funcionar como las de hoy en día; en cambio, no tienes que explicar la tecnología de dentro de mil, lo que implica una menor responsabilidad y una mayor libertad. O hablando de rediseños, no quiso revelar de cuántas maneras ha dibujado a Moira, para preservar la sorpresa, pero garantizó que todas merecen la pena. A la par que debió asegurar la consistencia de la propia Krakoa a través del tiempo, mordiéndose la lengua sobre lo que eso podría iimplicar sobre los orígenes de lo que pasará…
En cuanto a Patrulla-X: Merodeadores, Clemente adelantó que es, junto a la Patrulla de Jonathan Hickman y Leinil Francis Yu, la serie que más me le entretiene de «Amanecer de X«. Una diversión que Lolli atribuye al perfil cómico del guionista, Gerry Duggan, guionista no en vano de Saturday Night Live. Pero que en igual medida debemos atribuir a la compenetración entre ambos, desde Ojo de Halcón y nada menos que durante cinco años en Masacre, celebrando el refresco que representa tras todo ese tiempo el nuevo tono pirata de la serie, pese a lo laborioso de dibujar las embarcaciones. Kitty Pride capitaneará un barco del Club de Fuego Infernal para llevar nuevos mutantes a Krakoa. O mejor dicho Kate Pride, enfrentándoose a un gran cambio: se volverá más adulta, tambén más enfadada, cuando tenga que enfrentase a imprevistas preguntas sobre su propia naturaleza. Porque, ¿qué puede haber lesionado de esta manera a una mutante capaz de entrar en fase? Lo cual tiene mucha continuidad con Dinastía, Potencias y la Patrulla, pese a que Lolli no entendiera al principiio cómo encajaba con la historia principal.
Kate y el nuevo Club de Fuego infernal, junto a Krakoa, el Profesor X y Moira, serán para Lolli y Silva los grandes nombres que se recordarán de estas etapas. Mientras que, en su futuro, a Lolli le encantaría encontrarse con los Guardianes de la Galaxia, acaso por haberse encargado de su sección asgardiana; mientras Silva se declara antes que nada devoto de los mutantes, pero confiesa que con todo lo que se ha hecho en el cine, le encantaría poder jugar con Los Vengadores. Aunque de momento no se moverá de franquicia, anticipando que su próximo y de momento todavía secreto destino, tras un número de la Patrulla, volverá a ser nuevamente con Hickman.
La Patrulla-X vuelve a ser el cómic más importante de Marvel. Y es sólo el principio.
Iñigo de Prada.
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