Reseñas: Capitán Britania: Marvel Limited Edition 2: «El Asedio de Camelot» (1977) Incluye: Caballero Negro (1979-1980)

Al final del primer tomo veíamos como el serial del Capitán Britania cambiaba de cabecera, pasando a editarse en Super Spider-Man and Captain Britain. Un título, éste, que llevaba tiempo reeditando cómics de Spiderman de la Marvel americana, y que ahora cambiaba de nombre para incorporar las historias de nueva factura del Capitán Britania.

El serial sigue su curso en este segundo volumen precisamente justo donde se quedó en el precedente. Continuamos con los episodios de siete páginas en blanco y negro y sin apenas cambios en el equipo creativo. Jim Lawrence y Larry Lieber como argumentistas, Jim Lawrence como guionista y Ron Wilson como dibujante a lápiz. Equipo que se mantiene hasta el final de la serie con puntual excepción en un par de episodios en los que Pablo Marcos coge el lápiz. Precisamente Marcos es el principal entintador de Wilson, aunque no el único.

La etapa recogida en este volumen recopilatorio consiste en cuatro arcos que agrupan varios episodios cada uno sin hilo continuista entre ellos, más allá del protagonista. Episodios, por otro lado, de corte eminentemente superheroico, muy naif y fantasiosos. Los únicos personajes que disfrutan de cierta continuidad son los colegas de Brian Braddock, Courtney Ross y Jacko Tanner, pero tan sólo aguantan en los primeros episodios para luego desaparecer por completo.

En las dos primeras líneas argumentales los guionistas se valen de criaturas clásicas del género fantástico, para relatarnos sendas historias con la ingenuidad por bandera.

En primer lugar, una trama que mezcla la leyenda del Monstruo del Lago Ness con un alienígena un tanto chusquero.

A continuación, una incursión en el género del terror con todos los tópicos posibles. Un siniestro castillo, gárgolas que toman vida, una encarnación del diablo, un hombre lobo y la estrella de la función, el Barón Negro, un sosias del Conde Drácula de la cabeza a los pies.

Historias simplonas e inocentes que al menos pueden merecer el calificativo de simpáticas. Lo mejor es el trabajo de Ron Wilson, que luce bastante bien cuando lo entinta Pablo Marcos.

Los dos últimos arcos quizás están algo mejor, aunque apenas diferencias. Sólo que Lieber y Lawrence deciden poner en contexto a la patria británica apuntando a los británicos y a Gran Bretaña, respectivamente, como blanco de los villanos.

El primero de ellos sitúa al Capitán Britania en una isla repleta de peligros mortales, acompañado de una variopinta expedición bajo invitación del villano de turno, el siniestro Doctor Garra.

Aventura pura y dura en un entorno en el que los invitados deben sortear todo tipo de trampas a base de animales y plantas mutados y de criaturas de pesadilla.

El exiguo argumento y las motivaciones del villano son sonrojantes, mientras el grado de puerilidad aquí ya roza lo escandaloso, especialmente en lo relativo a los diálogos, pero la narración es tan dinámica y ocurren tantas cosas que no se puede negar su valor como buen entretenimiento.

El último arco es quizás el que aporta mayor madurez a la parte escrita. El argumento está algo más trabajado y hasta tiene su gancho, aunque el carácter ingenuo siga ahí. El Maestro Asesino es un chiflado que se divierte asesinando a coleccionistas de cualquier cosa, en una sinopsis que acaba evolucionando en una aventura fantástica de criaturas marinas y bestias mecánicas. Una locura incansable con la que resulta difícil aburrirse.

Finalizado el serial del Capitán Britania, el tomo no termina aquí ni mucho menos.

A continuación, se incluye un arco de Marvel Team-Up que será digno de análisis en su momento en el correspondiente tomo recopilatorio de la serie de Spiderman e invitados. Y, seguidamente, se incluye el serial del Caballero Negro originalmente publicado en la colección de Marvel UK, Hulk Comic, aprovechando que el Capitán Britania participa como personaje secundario. Una serie que reseño aparte al pertenecer a un personaje diferente.

No es hasta el final del volumen que volvemos a tener unos pocos episodios más del Capitán Britania, precisamente también publicados en Hulk Comic. Pero no son más que extractos de la serie inicial del héroe abanderado, la incluida en el tomo precedente a éste, a modo de origen del personaje.

Conclusión.

Estamos ante una serie de relatos argumentalmente simplones e ingenuos. Sin embargo, tienen capacidad para despertar simpatía y también pueden valer para pasar un rato entretenido, que ya es más de lo que puede decir la mayor parte del primer tomo.

En resumen, sin estar ante nada especialmente resaltable, al menos esta etapa tiene un pase.

 

Caballero Negro: Serie de Marvel UK (1979-1980)

El Caballero Negro fue uno de los pocos personajes que gozó de serie propia en la filial británica de Marvel en los años 70. Fue en el interior del título Hulk Comic, que también incluía historias inéditas de Hulk y Nick Furia.

La inclusión de este serial en el segundo tomo MLE del Capitán Britania viene dada por la intervención de éste como personaje secundario en las aventuras del Caballero Negro.

La serie debuta ya en el número 1 de Hulk Comic, a razón de episodios de tres páginas, todos en blanco y negro. El guionista es Steve Parkhouse en la totalidad del serial, mientras que el dibujo se lo reparten entre John Stokes y Paul Neary. Una serie que se alarga durante varias decenas de números, pero claro, estamos hablando de episodios de tan sólo tres páginas (dos en algunos casos), por lo que la extensión total equivaldría a unos siete comic-books americanos. Eso sí, la continuidad argumental es absoluta, lo equivalente a una única saga.

Nuestro protagonista es Dane Whitman, el Caballero Negro clásico, el de los Vengadores, mientras que el principal antagonista es Mordred, que ya inició su carrera como villano en la serie del Caballero Negro original de los años 50.

Precisamente, la estética general del serial, en cuanto a composición de viñetas y estilo de dibujo, nos trae a la memoria aquella breve colección y a toda una época del cómic americano, anterior a la era Marvel.

Pero esta serie, como decía, tiene un segundo protagonista que se incorpora al poco de iniciarse. Se trata del Capitán Britania, aquí apodado el Extraño durante un largo tramo a causa de su desconocida identidad. El Capitán padece amnesia y no es capaz de recordar quien es ni la procedencia de sus poderes.

Si en la serie de Marvel UK del Capitán Britania las leyendas artúricas marcaban el origen del personaje, en el caso que nos ocupa son la base de todo el entramado argumental. No en vano, personajes y demás parafernalia partícipe (Mordred, Merlín, la espada Excalibur, Camelot…) son parte indispensable de la mitología británica. Entre eso y una creo que notoria influencia del universo Tolkien, Parkhouse y sus dos escuderos construyen una entretenida crónica entre la aventura fantástica y el género de espada y brujería.

La historia narra el viaje del Caballero Negro y el Extraño a un lugar llamado Otromundo. Un viaje al encuentro de Merlín, maestro del Caballero Negro y conocedor del destino del Capitán Britania. El Rey Vortigen y el elfo Moondog acompañan a los dos protagonistas en un periplo lleno de obstáculos, empezando por la oposición del malvado Mordred. Los viajeros se enfrentan también a todo tipo de criaturas fantásticas en su camino, entre trolls, ogros y duendes, además del caminante Cormac, el Jinete Blanco de la Muerte o Mandrac, un dios del Inframundo, entre otros personajes.

En la segunda mitad, quizás la más interesante, nos acercamos al terreno de la fantasía heroica. Una vez alcanzado su destino, los viajantes se unen a Merlín en su cometido de localizar la tumba del mismísimo Rey Arturo. El grupo resultante nos trae a la memoria irremediablemente a la comunidad del anillo de Tolkien, así como también, en parte, las aventuras vividas. Conocemos al villano supremo, Necromon, Señor del Inframundo, mientras que la lucha frente a dragones y otras criaturas mitológicas, más el asalto al castillo de Camelot, amenizan el viaje hasta la tumba de Arturo.

Otro punto interesante del tramo final está en cómo los autores logran enlazar la trama con el origen del Capitán Britania. De hecho, el misterio sobre su amnesia queda resuelto y el Capi se reencuentra, al fin, consigo mismo.

El serial reseñado en realidad tuvo una interrupción de un puñado de números a medio camino. Números que insertaban un par de relatos de origen dedicados, respectivamente, al Capitán Britania y al Caballero Negro.

El correspondiente al Caballero Negro, que viene incluido al final del tomo, consiste en una simple reedición del episodio unitario publicado a finales de los 60 en el número 17 de Marvel Super-Heroes. Un número a cargo de Roy Thomas y Howard Purcell que precisamente narraba el origen del personaje. La única diferencia respecto al original está en que las páginas han sido recompuestas para la ocasión, habiendo sido expandidas muchas de las viñetas. Además de prescindir del coloreado.

Conclusión.

Una crónica, la del Caballero Negro, que ha resultado ser una grata sorpresa.

Tampoco es que estemos ante una saga memorable, pero sí es una aventura fantástica de leyenda con elementos de brujería suficientemente disfrutable.

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rockomic

9 Comments

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9 Comments on “Reseñas: Capitán Britania: Marvel Limited Edition 2: «El Asedio de Camelot» (1977) Incluye: Caballero Negro (1979-1980)
  1. Hola
    Me parece que la parte de Capitán Bretaña es de lo peor que he leído en mucho tiempo. Me he tomado su lectura como una obligación de inclinación histórica. Lo peor de lo peor, la saga de la isla. Todo patético, desde el risible guión hasta la «caracterización» de personajes (¿Por qué hay un mafioso?), conversaciones ridículas y… Bueno, de todo.
    Paré antes de empezar la parte del Caballero Negro porque la experiencia de la primera mitad había sido como nadar en un mar lleno de algas, pero ya empecé la segunda parte. Bastante mejora en los diálogos, los personajes prometen un poco más, igual que las situaciones. Ya veremos.
    Queja: El tamaño de la letra en la parte de Black Knight es minúsculo. Uno ya no está para forzar la vista de esta manera. Entiendo que el tipo de página no permita ampliar las viñetas, pero esto hace muuuuy difícil la lectura. Tendré que leerlo online.
    Rockomic, te he visto muy amable con este tomo. Te estás ablandando con la edad… o con la carga de trabajo autoimpuesto.

    • 😂 Ya puede ser, ya.
      Esto supongo que es cómo te pilla en ese momento. Pero, vamos, que te entiendo perfectamente, las historias del Capitán Britania son pueriles a más no poder, y los diálogos son de traca. Pero de tan ingenuo que a veces te acaba divirtiendo. Nada que no supere lo pasable, en cualquier caso.
      Tu opinión me sirve más para el primer tomo, quitando la parte cuando entra el Capitán América. Aquello sí que era malo a rabiar y encima aburrido.
      Pero vamos, que entiendo que lo de este segundo tomo esté a ese nivel.

      • Otros seriales británicos con personajes marvelitas (también hubo historias británicas de Star Wars y Transformers, aunque venían a ser relleno): Nick Fury (Steve Moore y un jovencito Steve Dillon, que también curraron en los cómics Marvel del Doctor Who …y sus spin-offs Kroton, the cyberman with soul y Abslom Daak, dalek hunter, que venía a ser una especie de Solomon Kane SciFi) y Night Raven (este personaje británico de inspiración pulp, que combinaba relatos ilustrados e historietas en su breve primera vida de finales de los setenta a mediados de los ochenta). También hubo algo de Spiderman (raro que lo de Spiderman fuese en comparación hasta tardío, ya a mediados de los ochenta, con un Barry Kitson jovencito …y algo verde todavía, entintado principalmente por un también todavía joven Mark Farmer).

  2. Como el anterior tomo este es también bastante flojeras y mucho te tienen que gustar los personajes o los dibujantes (y ni todos están bien) para salir contento del desembolso. Si en el anterior tomo el interés estaba en Trimpe y Buscema (principalmente Buscema), aquí está en Byrne (y la parte de Byrne, si no la tenéis ya, fácil lo tendréis para conseguirla en un tomo de lectura más agradable) y el gran John Stokes (alguien se acuerda de Ictíneo/Fishboy?🧐). Un saludo desde la lluviosa Galicia, Profe y Rockomic …y a todos TODOS. Salud y cómics.😎🖖

    • Bueno, si te gustan Britania, Trimpe, John Buscema (por cierto, habría quedado curioso incluir lo del Caballero Negro en las Cruzadas de Buscema y otros …y la historia cortita dibujada por Alan Davis), el Caballero Negro y John Stokes…

  3. Como no me va a gustar Buscema de echo es mi dibujante favorito, pero bien es cierto que el Cap.Britania no me llama la atención….que lo disfrute al que si , faltaría más!!!…

    • Y la mayoría de historias de estos dos tomos son reguleras (y peor que eso unas cuantas). Lo mejor es el dibujo y tampoco son tantas las historias destacables (Wilson y Marcos están por debajo de sus posibilidades) en ese apartado. Del segundo tomo lo mejor es lo del Caballero (y fuera del dibujo tampoco es tan bueno, pero mejor que lo de Britania).

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