Aviso de posibles spoilers si nunca has leído estos cómics.
Tras el primer tomo de la Biblioteca Marvel dedicada a Thor que incluía el relato de origen y nos presentaba el núcleo de personajes secundarios, esta segunda entrega sigue la misma estela en cuanto al estilo y calidad de sus historias y en cuanto a sus autores.
Un tomo que podemos dividir en dos mitades. La primera no ofrece ninguna diferencia respecto a lo visto en el primer volumen, puesto que ahí siguen Robert Bernstein y Joe Sinnott a los guiones y dibujo respectivamente, mientras que Stan Lee sigue limitándose a la labor argumental.
Es en la segunda mitad del tomo donde nos encontramos con dos novedades importantes, y ambas se estrenan en el número 97 de Journey into Mystery, título, recordemos, en el que se publican las aventuras del Dios del Trueno. Por un lado, Stan Lee coge definitivamente las riendas de Thor, haciéndose cargo de la parte escrita por entero. La otra novedad está en el estreno de los históricos Relatos de Asgard, una serie de complementos a razón de cinco páginas por número, en los que Stan Lee y Jack Kirby nos cuentan la historia ancestral de Asgard y los Nueve Reinos, así como la adolescencia y juventud de Thor en su entorno.
Las historias de la serie principal de Thor, sin embargo, pasan a ser dibujadas por Don Heck, de forma que la colección todavía no cuenta con el equipo que haría grande al título, el formado por Stan Lee y Jack Kirby. Eso sí, con el presente tomo quedamos justo a las puertas de que eso ocurra.
Kirby, aparte de los Relatos de Asgard tan sólo contribuye con dos episodios salteados en este tomo. Dos números que, a nivel gráfico, son sin duda los mejores de esta segunda entrega.
Seguimos estando ante episodios autoconclusivos de unas 13 páginas, con historias que son el fiel reflejo de la inocencia y la simplicidad argumental de la época.
El hecho de que Jane Foster aparezca mucho más que Odín ya nos da una idea del escenario en el que se siguen desarrollando las aventuras de Thor. Todavía falta un poco para que Asgard sustituya a la Tierra como localización predominante.
Eso sí, Loki se confirma como el archienemigo del Dios del Trueno, empezando con un número que tiene su encanto, en el que Thor viaja por el mundo a instancias de Loki.
Luego, está un relato de misterio y sci-fi sobre un tipo que inventa una máquina capaz de duplicar objetos y cuerpos. O un ingenuo episodio en el que Thor se enfrenta a Merlín.
Kirby, por su parte, aporta un par de buenos trabajos y la creación de dos oponentes con cierto futuro por delante, el Hombre Radiactivo y el Hombre de Lava.
Pero es la entrada de Stan Lee como guionista único la que nos trae los mejores números. Por lo menos en cuanto a la presentación de nuevos villanos, porque primero Cobra y seguidamente Mr. Hyde cuentan aquí con sus primeras apariciones en el Universo Marvel. Vale que el trabajo de Don Heck es discreto y que lo mejor de los dos villanos está por venir, pero ahí están esos relatos de origen de ambos.
Pero claro, nada comparable a los cuatro episodios iniciales de los Relatos de Asgard, que se incluyen aquí.
Para empezar, Lee y Kirby nos presentan a Ymir, Surtur, el Reino de los Trolls y los Gigantes de Tormenta. Casi nada. Episodios en los que conocemos los orígenes de Asgard y del universo mitológico, base sobre la que se edificarán las aventuras de Thor en el futuro. Pero, por encima de todo, nos encontramos por primera vez ante el Kirby avanzado. Su capacidad imaginativa y técnica da aquí un paso de gigante, situándose bastante por encima de lo que el Rey viene realizando en los grandes títulos de la casa. Desde la primera página se nota el cariño y dedicación del dibujante en relación con el resto de su producción contemporánea.
Conclusión.
Aunque tan sólo sumen 20 páginas, los cuatro primeros capítulos de los Relatos de Asgard son razón suficiente para adquirir este tomo.
La serie madre de Thor sigue la línea del primer tomo, completando la discreta etapa de rodaje de la colección. Pero hasta aquí, porque lo bueno empieza ya en el siguiente tomo.
Enlace a la ficha:
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Mola tu reseña de thor.
Si solo me interesara leer thor y tener una colección más antigua de él, ¿comprarías de mi los tomos.de la biblioteca marvel de thor o irías a por algunos tochos? Del material de thor más antiguo (solo tengo a partir de simonson)
Gracias, Pedro. 😉
Eso depende del formato que te guste. Si te lo vas a comprar todo, pues cualquiera de los dos te vale.
Con la BM puedes ser más selectivo, eso sí, si quisieras saltarte alguna etapilla. Aunque realmente a partir del tercer tomo, ya todo es recomendable.
Yo me tiraría de cabeza a la BM, la verdad, si no tienes mucha prisa. Tendrás todo en un mismo formato y con extras más apetecibles. Y te puede servir para probar otras colecciones en el mismo formato.
Bob Bernstein y Joe Sinnott, probablemente el momento más bajo de los primeros treinta años de Poderoso Thor.
Y no es que lo de Don Heck tuviese atractivos para nadie. Pero hasta Don Heck puede ser superado en mis tripas.😈
Estas historias cortas nos recuerdan que tras la aprobación del Code (por la propia industria, como pasó mucho antes con el Código Hays en el cine …no fue ninguna imposición estatal, como sí pasó en España, Italia, Francia, Bélgica, Reino Unido,…) y la desaparición (por boicot orquestado por la competencia) de la EC, los comic-books se habían infantilizado. Cómics una década anteriores les daban varias vueltas. Pero es que muchos de estos primeros cómics de la Era Marvel (y no solo los que no escribía el propio Lee, que solían ser los peores) no eran buenos ni para la época (salvo si los comparabas con los de DC y Charlton, todavía anclados en la segunda mitad de los cincuenta). De hecho los cómics de Lee, Kirby y Ditko inmediatamente anteriores (aquellas historias cortas de misterio, SciFi y monstruos gigantes) eran mucho mejores que estas historias cortas de Hombre Hormiga, Thor y Iron Man o los primeros números del pobre DD.
Arrastraban el miedo por lo de la caza de brujas y el Code Suso. Ten en cuenta que tanto Stan como Jack eran hombres bien maduritos en los 60’s y vivieron la anterior década acojonados. Por eso los primeros relatos eran bastante conservadores y usaban mucho troppo de los 50’s: monstruos gigantes, villanos comunistas o villanos asiáticos y comunistas y tal. Cuando la juventud de los 60’s que pensaban de manera muy diferente a sus mayores y súmale la influencia de los vientos renovadores sociales de los 60’s. En Marvel vieron que es lo que quería realmente la juventud y tras subirse al carro fueron mas osados desterrando la forma de narrar de la década pasada y el nacimiento de la Marvel comics que revoluciono la industria comiquera
Pero es que incluso las historias ya postCode que hacían en los cincuenta (y las del cambio de década anteriores a estos cómics, también cortas) eran por lo general bastante mejores a estas.
No exageres tanto Suso… cuando Kirby se pone las pilas en Thor y los 4F o Ditko y después Romita en Spiderman es una verdadera revoluciona. Hasta la contracultura de la época los adoran…
No exagero, de hecho no siquiera he hecho sangre, que podría haberlo hecho (podría haber mencionado más cosas …y recalcar otras). De lo aquí presentado, lo mejor, los Relatos de Asgard (que ya prometen cosas mejores …y hacen notar el amor de Kirby por la mitología).
Y creo que nadie en este foro ha alabado tanto como yo el Thor de Kirby (valle, miento: LUIS GRANA, que lo adora), pero no voy a enjabonar lo que no lo merece.
Cuando vuelve Kirby a Thor prácticamente (junto a los 4F) construye los cimientos del Universo Marvel. Y como he recalcado es cuando Stan y Jack llevan ya tiempo en el ajo con ellos. E incluso la cosa mejora cuando ocurre el relevo generacional. Ya que estaban construyendo un universo como nunca antes se había visto. Superando a la caduca DC… y de las strips, mejor no hablemos
Ya, pero no estamos hablando de eso todavía. Eso apenas empieza a intuirse en los Relatos de Asgard.
Ya lo se que en este tomo no… me refiero globalmente mas adelante. Que es cuando Marvel capto el interés de la juventud de la época y a la vez que evolucionaba el UM, prescindieron de tantos troppos de los comics de los 50
Los 4F de Romita y de Buscema tienen un dibujo muy bonito (a todos nos encanta) pero son mucho menos imaginativos (y creativos, que tiran mucho de reciclaje de ideas y regresos de personajes para compensar que Lee ya no tenía a su lado a ese volcán que vomitaba conceptos que era Kirby …No sorprende que salvo en Asombroso, al no tener a su lado a Kirby, Ditko y Romita de compañeros Lee empezase a abandonar series una detrás de otra para centrarse en ejercer de Editor Jefe y showman publicista…de hecho, para intentar buscar alargarlo probó fórmulas para que Romita generase más páginas y pudiese acompañarle en más series, pero resultaba imposible, Romita solo era un dibujante rápido para los cánones actuales, no podía producir lo que Kirby, Ditko o los Buscema…y John Buscema era rápido y productivo, pero no era un generador de ideas como los demás).
Pues si en este tomo no, entonces NO he exagerado.😈😁
OK, tota la raó… ¿Contento? Se nota que estudiaste leyes…
Le quitas toda la gracia si te «rindes» tan rápido.😘
No tengo muchas ganas de guerra… y técnicamente las historias de ese tomo son una chufla. Que yo hace unos pocos meses compre las cuatro omnis del Thor de Kirby y aun tengo en la memoria lo flojillas que son. Hasta que el Rey con los Relatos de Asgard y su segunda venida da la vuelta a la tortilla… de manera magistral.
Es que antes de los Relatos ni lo del Rey (y soy MUY Kirby) mola.
La suerte es que el flojeo en Thor son sólo dos tomos. A partir del próximo ya no hay excusas. 😉
Sí, a partir de que aparecen los Relatos de Asgard ya hay incentivos para seguir la serie …y luego esta sube …y sube (y dura …y dura …y mejor no sigo que luego me arrepiento😉).
Bueno, sí, los Relatos ya están en este segundo. Así que también.
Bueno, tan innovadores tampoco fueron, que Lee en los sesenta se dedicó a fusilar como un cosaco a Lee Falk y Dan Barry (incluso a Milton Caniff).
(Aunque tampoco podían copiar todo. Que allí, en las comic-strips, no había Comics Code)
Stan Lee no copia «mejora» ¿No has visto ese capitulo de los Simpsons?
La trama de los Skorpi en el Flash Gordon de Dan Barry era mejor que su historia de los Skrull, donde vamos a parar (las comparaciones, ya se sabe). Y podríamos seguir con Falk, Robbins o Caniff…y es que ya que copie cosas de Caniff de los cuarenta ya da más pena (y ya más contemporáneo, la propaganda anticomunista también le quedaba mucho mejor a Caniff en Steve Canyon, e igual ya resultaba un poquito sonrrojante), que debería estar innovando tras más de dos décadas de carrera, no copiando lo que ya se hacía cuando él empezaba a escribir. (Y ojo, que Lee tiene sus méritos, y no solo como editor y publicistas, pero también hay que decir las otras verdades, no solo alabarle)
Stan no copia… ¡lo mejora! y aparte que sabe venderse muy bien
Copiaba como un cosaco (hasta a sí mismo, reciclando nombres, poderes y conceptos que ya había usado anteriormente en esos años …o en los cuarenta).
Pero en la balanza de méritos y deméritos, ya sea como guionista o como editor pesa más lo positivo (al contrario que a otros a mí no vendrá a recriminarme ningún entrenador holandés 😈).
Hay que usar lo que se conoce o tiene a mano… y si copias… pues copia a los talentosos, ja….
Por cierto lo de fusilar en el mundillo del comic o en los pulps (la antesala a estos) no lo invento Lee ni mucho menos… el evoluciono y lo «mejoro» como bien dicen en los Simpsons. Y esto vale para casi todos los personajes de ficción mas representativos, si nos ponemos tikis mikis
Él ya lo hacía en los cuarenta (ya entonces copiaba a Falk, sosias de Mandrake incluido …vale que ni era el primero ni el segundo en Timely en hacerlo).
Pero de eso no se muere uno.😈
Mas copia era Zatara ¡leñe!
Pues NO, Monarko era exactamente igual de copia (incluso más, que el Príncipe de la Magia también iba con capita, no se limitaba al frac, la chistera y el bigotito …solo que el personaje no tuvo relevancia, no trascendió, tampoco es que le sobrasen los méritos). Bueno, entonces Mandrake era popularisimo, así que toda editorial de superhéroes que se preciase tenía un mago con chistera (salvo Fawcett, que tenía uno con turbante, Ibis …DC, que ya iba sobrada de personajes, podía permitirse ambas cosas😈).
Pero los comic-books tenían mayores posibilidades narrativas, por supuesto (especialmente una vez empezaron a hacerse historias de más de veinte páginas …y a encadenar varios números en una misma historia, aunque eso fue relativamente raro todavía en los sesenta), aunque los autores que venían de los cuarenta y cincuenta (salvo quizá Kirby, que lo hizo pronto) tardaron mucho en verlo.