Aviso de posibles spoilers si nunca has leído estos cómics.
Sigamos con las aventuras del atlante de Marvel con el segundo tomo de ésta, su Biblioteca Marvel.
El equipo formado por Stan Lee y Gene Colan sigue su trabajo en la primera parte de esta segunda entrega. Un volumen que se inicia dónde quedó el anterior, con la alianza entre el señor de la guerra atlante, Krang, y el Amo de Marionetas con el fin de arrebatar, el primero, el trono a Namor.
El arco desemboca en un crossover con la colección de Iron Man en Tales of Suspense. Krang sigue siendo la traicionera amenaza, pero además Namor tiene aquí que afrontar una supuesta traición de Lady Dorma. Por lo demás, el arco no tiene otro interés que el trabajo narrativo de Colan en la lucha cuerpo a cuerpo entre ambos héroes.
A partir de aquí, Gene Colan se alterna con Jack Kirby en el apartado gráfico coincidiendo con una nueva línea argumental que, en parte, es una prolongación de la de Krang, omnipresente también en este segundo volumen. Una saga que se alarga hasta el último número del tomo, que marca la despedida de Colan de la colección.
El Número Uno del Imperio Secreto se une a la fiesta intentando aprovecharse de un Namor que vuelve a caer amnésico después de aquel recordado regreso en Los Cuatro Fantásticos. Resulta de lo más interesante como Stan Lee juega con esta organización criminal, que acababa de hacer su debut en Hulk, de forma simultánea en los dos títulos que comparten páginas en la cabecera Tales to Astonish. Si en Hulk los miembros encapuchados del Imperio Secreto participantes llevan los números dos al nueve, en Namor es el Número Uno, quien hace irrupción, precisamente con el fin de reclutar al amnésico atlante para que les libre de Hulk. No estamos ante un crossover, no es necesario leerse la colección de Hulk para entender la trama de Namor, pero el vínculo entre ambas líneas argumentales resulta estimulante.
La relación con Lady Dorma en estos números es de amor/odio ante la desconfianza de Namor tras la supuesta traición de su dama. El trato de Namor hacia ella resulta un tanto autoritario como monarca intocable que es, pero Dorma también es de armas tomar y está dispuesta a conseguir el amor de su príncipe mediante juego sucio, si es necesario.
Los últimos dos números de la saga, y del tomo, significan el cambio en el apartado gráfico.
El penúltimo número está dibujado por Jerry Grandenetti, que afortunadamente no se convierte en el nuevo dibujante regular. Afortunadamente porqué el resultado es un horror. Ese honor corresponde ni más ni menos que a Bill Everett, el creador de Namor, que regresa a casa en el último número incluido y que seguirá en el puesto de dibujante a lápiz en el próximo volumen. Everett tampoco es Colan, por lo que la colección sale perdiendo de todas formas, pero sus dibujos tienen su encanto por el chute de nostalgia que significan.
Conclusión.
Los guiones en este segundo tomo son bastante discretos, quitando alguna idea resultona.
La parte gráfica, por su parte, está por encima gracias al buen hacer de Colan y Kirby, pero sin estar entre sus mejores trabajos.
La colección todavía tiene que pasar por un volumen más para llegar a sus buenos tiempos.
Enlace a la ficha:
- Reseñas: Peter Parker, el Espectacular Spiderman: tomo 3 (pendiente) (1980-1982) - 14 mayo, 2024
- Reseñas: Biblioteca Marvel 53: Namor 2 (1966-1967) - 9 mayo, 2024
- Reseñas: Biblioteca Marvel 52: La Patrulla-X 4 (1966) - 9 mayo, 2024
Simpático nada más. Pero ya es más que otras series Marvel del momento (DD, Iron Man, los X-Men post Kirby, incluso Los Vengadores post Kirby …Al lado de todas estas Hulk en ese momento una maravilla, coño, aunque no duela ser la primera en la que suele pensar la gente precisamente). Con un Colan al menos digno y un Everett que pese a ya muy graves problemas de dipsomanía todavía cumplía mínimamente la papeleta.
Y gracias a Rockomic una vez más por su promiscua productividad en esto de la difusión del llamado noveno arte.😉 …Salud y cómics.🤓🖖