Reseñas: Biblioteca Marvel 10: El Asombroso Spiderman 2 (1963-1964)

Aviso de posibles spoilers si nunca has leído estos cómics.

Segundo recopilatorio de la colección clásica de nuestro amistoso vecino Spiderman.

Tras el precalentamiento que significaban los primerísimos números incluidos en el primer volumen, en este segundo ya podemos hablar de madurez. A estas alturas, creo que ninguna serie de Marvel presenta la claridad de ideas e intenciones que Lee y Ditko exhiben en estas páginas, ni siquiera los Cuatro Fantásticos.

Creo que, dentro de la inocencia propia de la época, en realidad son tebeos más maduros de lo que parecen en la primera toma de contacto.

Si en la primera entrega de la Biblioteca Marvel dedicada a Spiderman nos eran presentados tres de los supervillanos más clásicos del lanzarredes, este segundo tomo cuenta con otros dos estrenos importantes: el Lagarto y Electro. La maestría de Ditko diseñando uniformes, así como el imaginativo origen de los villanos ideado por Stan Lee, son el secreto del éxito detrás de todos estos personajes.

Es cierto que un villano que consiste en un lagarto parlante que tiene el poder de someter a cualquier reptil a su voluntad, sobre el papel, puede sonar hasta ridículo. Pero la brillante idea por la que Doc Connors se convierte en su alter ego, sumada a la singular imagen del lagarto vestido con bata de médico, harán del Lagarto uno de los villanos más insólitos y aplaudidos del universo arácnido.

Electro, por su parte, tiene la suerte de vestir uno de los trajes más llamativos del universo arácnido.

Si bien no me atrevería a incluirlos en la lista de villanos más clásicos de Spidey, no podemos olvidarnos del Gran Hombre y su grupo de secuaces, los Forzadores, que también hacen su presentación en uno de los números incluidos en este tomo. Lejos de llevar disfraces llamativos, los Forzadores (Montana, Fancy Dan y el Buey) visten de calle.

El Gran Hombre trae consigo la primera incursión de la colección (y del recién creado Universo Marvel) en el género de gángsters. La lucha por el reinado del crimen en Nueva York será uno de los argumentos más recurrentes y que mayores alegrías darán a los lectores de esta colección en el futuro.

Otra novedad importante, aunque de otra índole, la tenemos en el número que abre este tomo. Por primera vez en la Era Marvel, un supervillano aparece como tal en un segundo título. Estoy hablando, como no, del Doctor Muerte.

Es probable que Stan Lee pensara en el Doctor Muerte como reclamo para atraer a los lectores de los Cuatro Fantásticos hacia las páginas del lanzarredes.

Para completar el apartado dedicado a los villanos, este tomo también cuenta con el primer enemigo de Spiderman que repite protagonismo, que no es otro que el Buitre.

Otro que repite es la Antorcha Humana, consolidando lo que sin duda es el primer colegueo entre superhéroes del Universo Marvel. El encuentro en cuestión ocurre en una historia corta de complemento que parece más funcional que otra cosa. Me imagino que la intención de Stan Lee era meter a una cara conocida, como es la Antorcha Humana, en la portada de un número sin un supervillano potente.

El caso es que el relato corto parece una innecesaria repetición de otro relato de complemento aparecido poco antes en el primer anual de los Cuatro Fantásticos. En esa historia, Spidey se mide a los Cuatro Fantásticos en su intención de unirse al supergrupo. La clásica pelea inmadura, propia de estos tiempos, que sorprendentemente obtiene una réplica en el número que nos ocupa. Porque, por mucho que la Antorcha sea el objetivo de un Spiderman con ganas de bronca, la riña acaba siendo con el cuarteto al completo.

Por si fuera poco, el equipo gráfico es el mismo en ambos complementos, Jack Kirby al lápiz y Steve Ditko al entintado. Al menos esta particularidad nos deja un dato para la historia, ya que estamos ante la única historieta dibujada por Jack Kirby dentro de The Amazing Spider-Man.

La historia principal del citado número está mucho mejor. Una especie comedia de acción tan ingenua como divertida, con protagonismo de Flash Thompson en uno de sus estelares ridículos.

Si los villanos juegan un papel primordial en estos cómics, tan o más importante es todo lo relativo a la «otra vida» de nuestro protagonista. No sólo en referencia a la vida privada y el entorno de Peter Parker, sino también al recelo que suscita el nuevo héroe en la sociedad. Y ahí el principal instigador de odio es J. Jonah Jameson, que sigue creciendo a pasos agigantados como personaje.

Los problemas de índole personal de Peter Parker son equiparables a los de cualquier adolescente de la época. Dificultades varias para mantener una relación sentimental estable, los problemas de salud de Tía May, el menosprecio por parte de sus compañeros de clase, problemas financieros… El manual básico de quebraderos de cabeza de nuestro querido Spiderman, vaya.

La lista de personajes secundarios no suma ninguna nueva incorporación respecto al primer tomo. Ahí siguen Flash Thompson y Liz Allen en representación de los compañeros de clase, mientras que Betty Brant pasa a ser el nuevo interés amoroso de Peter Parker. Es curioso como Betty, por su forma de vestir, por su peinado, da la sensación de ser una mujer mucho más mayor que Peter Parker. No olvidemos que, en esta primeriza etapa, Peter es un adolescente menor de edad.

Conclusión.

Creo que aquí ya podemos hablar sin tapujos de tomo imprescindible. No sólo por el tramo insalvable en la trayectoria de Spiderman que es, sino también por lo que nos ofrecen las propias historias. Es fácil imaginar a los lectores de la época alcanzando ya un notable grado de adicción a las aventuras del arácnido.

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13 Comments on “Reseñas: Biblioteca Marvel 10: El Asombroso Spiderman 2 (1963-1964)
  1. A Lee le gustaban los villanos totémicos animales …y a Ditko le gustaban los gangsters con sombrero y los uniformes con mucho color verde.😈

  2. No diría yo que el diseño de uniformes superheroicos y similares eran precisamente el fuerte de Ditko (otra cosa ya era su habilidad para crear personajes místicos y entidades sobrenaturales y cósmicas), pero la habilidad de causar impresión (aún con los diseños más simples o ridículos) sin duda la tenía el hombre.

    • Hombre, ya sólo con el traje de Spiderman se ganó el cielo. 😉
      Llámale crear uniformes llamativos o diseñar personajes atractivos, pero lo cierto es que de todos los villanos que creó ninguno sufrió modificaciones por parte de los dibujantes que le sucedieron. Son diseños ya definitivos desde la primera aparición.

  3. Lo de los hombres lagarto (y otras variantes reptilianas) como perversos villanos (incluso devoradores de hombres) era un clásico desde los mejores días del pulp (incluidos grandes como Edgar Rice Burroughs y Robert Erwin Howard).

  4. Las guerras de bandas sin duda fueron un recurso constante para Lee cuando escaseaban las ideas, como guionista y como editor (aún durante la etapa de Conway Lee seguía teniendo un ojo puesto en la serie Asombroso, la niña de sus ojos junto con la cabecera del Surfista, personaje que pese a no haber tenido mucho que ver con su creación decidió quedarse para él de lo encantado que quedó con el mismo …probablemente por eso el Asombroso de Conway tenía un nivel bastante superior al resto de sus trabajos de la época, por la «tutela» sobre la cabecera ejercida por Lee y Thomas, como mirando por encima del hombro el trabajo de Conway)

  5. El Doctor Doom como oponente de Spiderman no consigue funcionar realmente (se ve raro). En cambio, el team-up con el gamberrete Johnny Storm, de edad similar pero con sus contrastes (incluso su choque de personalidades) sí funciona perfectamente …y de ahí que se repitiese de cuando en cuando la fórmula (aunque pasados los años, con los personajes más mayores, funcionaba más como recurso nostálgico que otra cosa …pero la nostalgia a veces funciona, como se puede ver en la miniserie de los mismos de Slott). Pena que no se hiciese más (algo se hizo) con el Hombre de Hielo también (probablemente porque en aquellos años los mutantes no interesaban a casi nadie), pues había potencial ahí (como supieron ver en la serie animada de Spiderman y sus superamigos …aunque allí, por cuestiones de derechos tuvieron que sustituir a Johnny Storm por un nuevo personaje: Angelica aka Firestar).

    • Spider-Man and his Amazing Friends …lo lógico habría sido que ya en los sesenta hubiese tenido Marvel un cómic así (pero con la Antorcha en vez de «Ángel», claro), el potencial de ese trío de héroes adolescentes como compañeros (como mínimo ocasionales) era evidente (con el choque de carácter Parker /Storm y el contraste hielo/fuego).

  6. Luego se nos explicaría que Betty era muy poco mayor que Betty y que había tenido que sustituir a su madre como secretaria de JJJ (después de que la empresa de trabajo temporal dejase de enviarle candidatas al viejo ogro por lo horrible persona que era con todas …Betty necesitaba el dinero y no le quedaba otra que aguantarlo, además, ya sabía por su madre como era JJJ, y cuando Jonah finalmente se enteró de su situación decidió ignorar que era menor) para poder hacer frente a las facturas médicas de madre y a las deudas de su hermano con la mafia.

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